La rosa encantada de Martín y Lucía


El joven estudiante se llamaba Martín, y la hermosa joven era Lucía. Martín estaba decidido a encontrar la rosa más hermosa y perfecta para Lucía, así que partió en busca de la flor ideal.

Recorrió campos y jardines, pero ninguna rosa parecía ser lo suficientemente especial para su amada. Un día, mientras caminaba por el bosque, vio una luz brillante entre los árboles.

Se acercó con curiosidad y descubrió un jardín secreto lleno de rosas rojas tan hermosas como nunca antes había visto. En ese momento supo que allí encontraría la rosa perfecta para Lucía.

Martín se adentró en el jardín y buscó cuidadosamente entre las flores hasta que encontró una rosa roja deslumbrante, más bella que todas las demás. Sin embargo, justo cuando iba a tomarla, apareció una hada anciana. "¿Qué haces aquí, joven viajero?", preguntó el hada con voz suave pero firme.

Martín explicó tímidamente que buscaba la rosa perfecta para regalar a Lucía y ganar su corazón. El hada sonrió comprensiva y le dijo:"Esta rosa es mágica y solo puede ser entregada por amor verdadero. Si tu intención es pura, podrás llevártela.

"Con determinación en su corazón, Martín prometió al hada amar a Lucía sinceramente por encima de todo. Con lágrimas en los ojos por la emoción del momento, cortó la rosa roja mágica y salió del jardín.

Al llegar al palacio donde vivía Lucía, Martín le entregó la preciosa rosa con toda su ternura y lealtad reflejadas en sus ojos. Al verla, los ojos de Lucía se iluminaron de felicidad y emoción. "¡Es la rosa más hermosa que he visto! ¡Gracias, Martín!", exclamó ella emocionada.

Esa noche, en el baile real, Lucía bailó con Martín bajo las estrellas mientras sostenían la rosa roja entre ellos como símbolo de su amor sincero e inquebrantable.

Desde entonces, Martín y Lucía vivieron felices para siempre en un amor puro y verdadero que había sido fortalecido por el regalo de aquella maravillosa rosa roja mágica.

Dirección del Cuentito copiada!