La Tierra Renacida
Había una vez un pequeño planeta llamado Tierra que estaba muy triste. Los ríos ya no fluían con alegría, los árboles perdían su verdor y los animales se veían apagados. Todos notaban que algo no andaba bien.
Un día, la Tierra decidió hablar con el Sol, su gran amigo y confidente. Le contó entre sollozos que se sentía sola y cansada de ver tanta destrucción a su alrededor.
El Sol, preocupado por su amiga, le sugirió buscar ayuda en los seres más inteligentes de la Tierra: los humanos. La Tierra decidió seguir el consejo del Sol y convocó a una reunión con todos los seres humanos en un hermoso bosque.
Cuando llegaron, se sorprendieron al ver a la Tierra tan apagada y triste. "-¿Qué te pasa, querida amiga?", preguntaron al unísono. "-Estoy cansada de ver cómo me maltratan y me descuidan.
Necesito que me ayuden a cuidarme mejor", respondió la Tierra con voz temblorosa. Los humanos se miraron unos a otros sintiéndose avergonzados por no haber prestado atención antes a las señales de la Tierra. Decidieron entonces unirse para ayudarla a recuperar su vitalidad y alegría perdidas.
Comenzaron plantando árboles, limpiando ríos y mares, reciclando la basura y respetando a todos los seres vivos que habitaban en la Tierra. Poco a poco, el planeta empezó a sanar gracias al esfuerzo conjunto de los humanos.
Con el tiempo, la Tierra volvió a sonreír y todo volvió a florecer como antes. Los animales volvieron a corretear felices por los campos, las plantas reverdecieron con fuerza y los ríos cantaban melodías cristalinas.
"-Gracias amigos humanos por haber escuchado mi llamado y por haberme ayudado cuando más lo necesitaba", dijo la Tierra emocionada durante otra reunión en el bosque. Desde ese día, todos comprendieron lo importante que era cuidar de la Tierra para asegurar un futuro próspero para las generaciones venideras.
Y así fue como la tristeza inicial de la Tierra se transformó en esperanza y alegría gracias al amor y compromiso de todos sus habitantes.
FIN.