La travesura de Pedro
Pedro era un niño muy inteligente, siempre con una sonrisa en su rostro y lleno de energía. Sin embargo, su inquietud y desobediencia a veces le metían en problemas. Un día, Pedro decidió hacer una travesura.
- 'Pedro, por favor, ordena tu cuarto', le dijo su mamá. - '¡Ya lo voy a hacer!', respondió Pedro con impaciencia. Pero en lugar de ordenar su cuarto, decidió salir a jugar con sus amigos.
Durante el juego, Pedro encontró una forma de ayudar a un vecino con su jardín, lo que lo hizo sentirse tan feliz que se olvidó por completo de la orden de su mamá. Mientras tanto, su mamá y su hermana lo buscaron por la casa, preocupadas.
- '¿Dónde estará Pedro?', se preguntaban. Finalmente, al anochecer, Pedro regresó a casa, pero se encontró con caras preocupadas. - 'Pedro, te estábamos buscando por todas partes', dijo su mamá con tono serio. Pedro se sintió mal por haber preocupado a su familia.
Sin embargo, les contó cómo había ayudado al vecino, demostrando que su travesura había sido por una buena causa.
A partir de ese día, Pedro aprendió la importancia de obedecer las órdenes de sus padres, pero también de seguir su corazón para ayudar a los demás. Con el tiempo, su inquietud se convirtió en energía para hacer el bien, y siempre fue recordado como el súper amigo feliz que siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás.
FIN.