La única llamada de Sofía

Había una vez en un tranquilo barrio de Buenos Aires una niña llamada Sofía. Sofía no era la niña más linda ni la más popular de la escuela, pero tenía una sonrisa sincera que iluminaba a todos a su alrededor.

Estaba a punto de terminar el año escolar y aún no había experimentado el amor. Un día, mientras paseaba por el parque, encontró un teléfono público y decidió hacer una única llamada.

Marcó un número al azar y del otro lado contestó un chico llamado Mateo. Comenzaron a hablar y descubrieron que tenían mucho en común. A lo largo de varias conversaciones telefónicas, Sofía comenzó a sentir mariposas en el estómago cada vez que hablaba con Mateo.

El amor estaba floreciendo. Sin embargo, Sofía no sabía cómo lucía Mateo, ya que nunca se habían visto en persona. Entonces, decidieron encontrarse en el parque una tarde. Cuando Sofía llegó al parque, nerviosa y emocionada, vio a Mateo parado bajo un árbol.

Él también había sentido lo mismo por ella. Se abrazaron y supieron que habían encontrado el amor.

Juntos descubrieron que la belleza va más allá de la apariencia física y que lo que realmente importa es lo que hay en el corazón. Sofía terminó el año escolar con un nuevo amor en su vida y la valiosa lección de que el verdadero amor encuentra su camino, sin importar cómo luzcamos por fuera.