La valentía de Aina

Aina era una niña muy ingeniosa y creativa. Le encantaba dibujar, leer y escribir cuentos. Siempre estaba inventando historias fantásticas en su mente. Pero había un problema que la preocupaba mucho: tenía miedo de hablar en público.

Cuando se encontraba frente a muchas personas, sentía que las palabras no salían de su boca y temblaba como una hoja.

Un día, su maestra le preguntó si quería presentar el proyecto que habían preparado en clase ante los demás alumnos y padres. Aina se puso muy nerviosa y dijo —"no"  con la cabeza. - ¿Por qué no quieres hacerlo, Aina? -preguntó la maestra. - Tengo miedo de equivocarme o decir algo tonto -respondió Aina con voz baja.

La maestra sonrió comprensiva y le dijo:- No te preocupes tanto por eso, Aina. Todos cometemos errores, pero lo importante es seguir adelante e intentarlo otra vez. Además, tienes mucho talento para contar historias interesantes y originales.

¡No te rindas! A partir de ese momento, Aina decidió enfrentar su miedo poco a poco. Empezó por hablar más en clase cuando la maestra hacía preguntas o pedía opiniones sobre algún tema.

También practicó frente al espejo en casa y grabándose con su celular para corregir sus errores y mejorar su dicción. Finalmente llegó el día de la presentación del proyecto escolar ante los padres y compañeros.

Aina estaba nerviosa pero trató de mantenerse tranquila respirando profundamente antes de comenzar a hablar. Para sorpresa de todos, Aina habló con seguridad y fluidez, explicando su proyecto de manera clara y detallada. Los demás alumnos la aplaudieron y los padres se acercaron a felicitarla por su excelente trabajo.

Aina se sintió muy orgullosa de sí misma por haber superado su miedo y demostrar todo lo que podía hacer cuando se esfuerza y confía en sus habilidades.

Desde entonces, Aina siguió practicando para hablar en público cada vez mejor y compartiendo sus historias imaginativas con el mundo entero.