La valentía de Leyre en Villa Esperanza


Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Esperanza, donde vivía Leyre, una niña alegre y valiente. A Leyre le encantaba ir al parque con sus amigos para jugar y divertirse.

Sin embargo, un día algo inesperado sucedió: sus amigos no pudieron acompañarla y se encontró sola en el parque. Leyre jugaba en los columpios sintiéndose un poco triste por la ausencia de sus amigos cuando de repente comenzó a sentir que alguien la observaba.

Se detuvo y miró a su alrededor, pero no había nadie a la vista. Decidió ignorar esa sensación y seguir jugando. Pero conforme pasaba el tiempo, la sensación de ser observada se intensificaba.

Leyre empezó a sentir miedo y decidió regresar a casa. Cuando estaba por salir del parque, escuchó unos pasos detrás de ella. Al girarse, vio a un chico vestido todo de negro sosteniendo un cuchillo.

- ¡Ayuda! -gritó Leyre mientras corría tan rápido como podía. El chico comenzó a perseguirla por el parque mientras ella buscaba desesperadamente ayuda. En su huida, recordó las enseñanzas de sus padres sobre cómo actuar en situaciones peligrosas.

Leyre recordó que debía mantener la calma y buscar ayuda lo más rápido posible. Corrió hacia la salida del parque donde vio a Don Elías, el guardia del pueblo. - ¡Don Elías, ayúdeme! -exclamó Leyre entre lágrimas-.

¡Hay alguien persiguiéndome con un cuchillo! Don Elías rápidamente se acercó a Leyre y le preguntó qué estaba pasando. La niña le contó lo sucedido mientras recuperaba el aliento. El guardia actuó con rapidez y llamaron juntos a la policía.

Mientras esperaban, Don Elías consolaba a Leyre diciéndole:- Tranquila Leyre, estás segura conmigo. Has hecho lo correcto al pedir ayuda. Finalmente llegaron los oficiales quienes detuvieron al chico que había estado persiguiendo a Leyre.

Resulta que era un joven con problemas mentales que se había escapado de su hogar. Después de ese incidente, los padres de Leyre decidieron inscribirla en clases de defensa personal para que aprendiera cómo protegerse en caso de peligro.

También hablaron sobre la importancia de estar alerta en todo momento y pedir ayuda si se sienten amenazados. Desde ese día, Leyre comprendió que siempre es importante estar preparados ante cualquier situación riesgosa y nunca dudar en pedir auxilio cuando sea necesario.

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