La valentía de Violeta
Violeta era una niña curiosa y alegre que disfrutaba jugando en el parque con sus amigos. Un día, mientras caminaba por la vereda, un niño mayor la empujó y la hizo caer al suelo.
Violeta se levantó con lágrimas en los ojos, sintiéndose asustada y confundida. En ese momento, recordó las palabras de su abuela: “La valentía no es la ausencia de miedo, sino la determinación de seguir adelante a pesar de él”.
Decidida a no dejarse intimidar, buscó ayuda y contó lo sucedido a sus padres y maestros. Juntos, buscaron soluciones para evitar que el niño volviera a lastimar a alguien. Además, Violeta practicó técnicas de defensa personal y se rodeó de amigos que la apoyaban.
Con el tiempo, el niño entendió las consecuencias de sus actos y pidió disculpas a Violeta. Esta experiencia, aunque dolorosa, fortaleció la valentía y la determinación de Violeta, quien supo defenderse con coraje y buscar ayuda cuando la necesitaba.
FIN.