La valiente protectora de Villa Feliz
Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Feliz, una niña llamada Federica. Federica era conocida por todos en el pueblo como la domadora de dragones, la super heroína y la justiciera.
Desde muy pequeña demostró tener un gran corazón y un espíritu valiente que la impulsaba a ayudar a los demás. Un día, mientras paseaba por el bosque encantado que rodeaba Villa Feliz, Federica escuchó unos gritos desgarradores.
Siguiendo el sonido, descubrió a un grupo de dragones asustados por unos cazadores furtivos que intentaban capturarlos para vender sus escamas.
Sin dudarlo ni un segundo, Federica se acercó a los cazadores y les dijo con voz firme: "¡Dejen a estos dragones en paz! Ellos son seres maravillosos que merecen respeto y libertad". Los cazadores, sorprendidos por la valentía de la niña, decidieron hacer caso omiso a sus palabras y continuaron con su plan.
Fue entonces cuando Federica sacó su flauta mágica y comenzó a tocar una melodía dulce y armoniosa. Los dragones, hipnotizados por la música, empezaron a moverse con gracia al compás de las notas. "¡Deténganse ahora mismo o tendrán que vérselas conmigo!" -advirtió Federica mientras seguía tocando su flauta mágica.
Los cazadores, viendo el poder de la niña sobre los dragones, decidieron huir despavoridos dejando atrás sus malas intenciones. Los habitantes del pueblo salieron de sus casas para ver lo ocurrido y quedaron impresionados por el coraje de Federica.
Desde ese día, Federica se convirtió en la protectora oficial de los dragones del bosque encantado. Cada vez que alguien intentaba hacerles daño o perturbar su paz, ella estaba allí para defenderlos con uñas y dientes.
Pero no solo se dedicaba a proteger a los dragones, también ayudaba a resolver problemas en el pueblo como detener ladrones o rescatar gatitos perdidos en los árboles. Siempre lista para luchar contra la injusticia y llevar alegría a quienes lo necesitaban.
Con el tiempo, Federica se ganó el cariño y admiración de todos en Villa Feliz. Su valentía inspiraba a grandes y chicos a creer en ellos mismos y luchar por lo que es justo.
Y así fue como una simple niña llamada Federica se convirtió en la domadora de dragones más valiente, super heroína más poderosa y justiciera más querida de todos los tiempos.
FIN.