Las aventuras de Ian Alexander
Ian Alexander era un niño muy curioso y valiente que un día decidió salir a explorar el bosque cerca de su casa.
Mientras caminaba entre los árboles, se distrajo siguiendo a una mariposa y, de repente, se dio cuenta de que se había perdido. Ian miró a su alrededor, pero no reconocía nada. -¡Vaya, no sé dónde estoy! - pensó con preocupación.
Decidido a encontrar el camino de regreso a casa, Ian comenzó a caminar sin saber que viviría muchas aventuras en el camino. Durante su travesía, conoció a una ardilla parlanchina que le enseñó a trepar árboles y a ver el mundo desde arriba.
Luego, se encontró con un mapache muy astuto que le mostró cómo buscar comida en el bosque. Después de varios días, Ian conoció a una familia de conejos que le enseñó a construir un refugio con hojas y ramas. Con el tiempo, Ian aprendió a orientarse por las estrellas y a escuchar los sonidos del bosque.
Después de muchas aventuras y desafíos, Ian finalmente encontró el camino de regreso a casa. Al entrar por la puerta, su familia lo recibió con alegría y alivio.
Ian les contó todas las increíbles aventuras que vivió y todo lo que había aprendido en el bosque. Desde ese día, Ian siguió siendo un niño valiente, pero aprendió a ser más prudente en sus exploraciones. Aunque nunca olvidaría las aventuras que lo llevaron a casa.
FIN.