Las aventuras de las dos hormigas recolectoras

En un hermoso jardín, vivían dos amigas hormigas llamadas Anita y Lola. Un día, ambas decidieron salir en busca de migas de pan para llevar a su hormiguero.

"Vamos Anita, hoy es un buen día para recolectar migas de pan", dijo Lola con entusiasmo. "Sí, vamos a llenar el hormiguero de deliciosas migas", respondió Anita emocionada. Juntas se dispusieron a buscar por el jardín, sorteando obstáculos y superando desafíos.

En su travesía, se encontraron con un arroyo que debían cruzar. "¡Oh no, cómo cruzaremos el arroyo con estas migas tan grandes!" exclamó Anita preocupada. Pero, con ingenio y trabajo en equipo, lograron construir un pequeño puente con hojas y palitos.

Una vez al otro lado, encontraron una caja de zapatos abandonada, la cual se convirtió en un laberinto para ellas. Con valentía, sortearon los laberintos y peligros hasta llegar a su destino. Tras superar muchos desafíos, finalmente lograron recolectar una gran cantidad de migas de pan.

Con esfuerzo y cooperación, llevaron las migas al hormiguero. "¡Lo logramos!" exclamaron felices. Desde ese día, Anita y Lola aprendieron que trabajando juntas y con determinación, pueden superar cualquier desafío que se les presente.