Las aventuras de las Vocales en el Parque

En un hermoso día de sol, las cinco amigas Vocales, A, E, I, O y U, decidieron encontrarse en el parque para pasar una tarde divertida juntas. Al llegar, se saludaron efusivamente y comenzaron a explorar el lugar.

"¡Qué lindo es este parque, A!" exclamó E emocionada. "Sí, es perfecto para jugar y aprender", respondió A. Juntas se dirigieron hacia un hermoso prado, donde se encontraron con el señor Consonante, quien estaba construyendo un castillo de arena.

"¡Hola amigas Vocales! ¿Qué tal si me ayudan a construir este castillo mágico?", propuso el señor Consonante. Las vocales aceptaron encantadas y cada una aportó su esfuerzo en la construcción.

A aportó los ladrillos, E ayudó a nivelar la arena, I hizo las ventanas del castillo, O decoró con conchas marinas y U transportó cubos de agua para mantener la arena húmeda. Finalmente, el castillo quedó espectacular y todas celebraron con alegría. Mientras jugaban, escucharon risas provenientes del bosque cercano.

Intrigadas, se dirigieron hacia el sonido y descubrieron a un grupo de niños tristes porque habían perdido su pelota. Sin dudarlo, las Vocales se unieron para ayudar. "No se preocupen, ¡vamos a encontrar su pelota juntos!", exclamó A con determinación.

Cada una utilizó sus habilidades: E escuchó atentamente, I señaló la dirección del sonido, O olfateó el aire y U buscó con sus ojos agudos. Gracias a su trabajo en equipo, lograron encontrar la pelota y los niños estaban felices.

Las Vocales se despidieron de sus nuevos amigos con una sonrisa en el rostro. Al volver al prado, se dieron cuenta de que ya estaba atardeciendo. "Fue un día maravilloso, gracias por ser tan buenas amigas", dijo U con ternura.

"¡Sí, aprendimos que juntas podemos lograr muchas cosas!", agregó I con entusiasmo. Las Vocales se abrazaron, agradecidas por la aventura vivida.

Con el corazón lleno de alegría, regresaron a sus casas, sabiendo que la amistad y el trabajo en equipo siempre traen grandes satisfacciones.