Las Aventuras de Nahia la Llorona y su Hermano Iker el Cabezón

En un pueblo mágico y colorido, vivían dos hermanos muy especiales. Nahia, la niña que lloraba por todo, y su hermano Iker, conocido por su gran cabeza llena de ideas brillantes.

Un día, el sol brillaba en lo alto del cielo, y Nahia se despertó con una gran sonrisa en su rostro. 'Hoy será un día genial', pensó. Sin embargo, al levantarse de la cama, tropezó con su gato y comenzó a llorar. '¡Ay, mi gato! ¡Pobrecito!', sollozaba Nahia.

Iker, al escuchar el llanto de su hermana, entró corriendo a la habitación. '¿Qué sucede, Nahia? ¿Por qué lloras otra vez?', preguntó preocupado. -'Me golpeé con el gato, Iker. ¡Pobrecito, debe estar herido!', respondió Nahia entre sollozos.

Iker la abrazó y le dijo: 'Tranquila, Nahia, el gato está bien. A veces las cosas pueden doler, pero no es para llorar tanto. Vamos, te enseñaré una canción que te ayudará a sentirte mejor'.

Iker tomó su guitarra y juntos compusieron una canción alegre que hablaba sobre superar los obstáculos con valentía. La melodía y la letra animaron a Nahia, quien pronto dejó de llorar y comenzó a reír. '¡Gracias, Iker! Eres el mejor hermano del mundo', exclamó Nahia, abrazando a Iker.

Desde ese día, Nahia intentó recordar la canción cada vez que sentía ganas de llorar, y poco a poco las lágrimas se volvieron menos frecuentes.

Iker, por su parte, continuó compartiendo sus ideas brillantes con su hermana, y juntos vivieron muchas aventuras emocionantes en su pueblo mágico y colorido.