Las emociones de Joaquín

Un día, Joaquín se despertó con una gran sonrisa en su rostro. Se sentía muy feliz y lleno de energía. Saltó de la cama y corrió hacia la cocina para desayunar con su mamá.

"-Buenos días, mamá", dijo Joaquín mientras se sentaba a la mesa. "-Buenos días, mi amor. ¿Cómo estás hoy?", preguntó su mamá. "-Estoy muy feliz", respondió Joaquín con una gran sonrisa.

Su mamá lo miró y le dijo: "-Me alegra mucho que te sientas así, Joaquín. Recuerda que todas las emociones son válidas y está bien sentirse feliz. "Joaquín asintió con la cabeza mientras disfrutaba de su desayuno. Después de comer, decidió salir al parque a jugar con sus amigos.

Corrió por el pasto, jugó en los columpios y se divirtió muchísimo. Sin embargo, cuando llegó la hora de regresar a casa, algo cambió en él. Empezó a sentirse triste por tener que dejar el parque tan pronto.

Cuando llegaron a casa, su mamá notó que no estaba tan contento como antes. "-¿Qué pasa, mi amor? ¿Por qué estás triste ahora?", preguntó ella preocupada.

"-Es que no quiero irme del parque todavía", respondió Joaquín con lágrimas en los ojos. Su mamá lo abrazó y le dijo: "-Entiendo cómo te sientes, pero recuerda que también es válido sentirse triste a veces. Es normal extrañar cosas o lugares divertidos como el parque.

"Joaquín se sintió un poco mejor después de hablar con su mamá. Decidieron hacer algo juntos para distraerse y se pusieron a cocinar una deliciosa torta de chocolate.

Pero cuando la torta estuvo lista, Joaquín se quemó con el horno y empezó a sentir mucho dolor. Su mamá lo llevó rápidamente al baño para ponerle agua fría en la quemadura. "-¡Ay! ¡Duele mucho!", gritaba Joaquín mientras su mamá le ponía agua en la quemadura. "-Lo sé, mi amor.

Es normal sentir dolor cuando te lastimas", le explicaba ella mientras lo abrazaba fuerte. Después de unos minutos, el dolor empezó a disminuir y Joaquín se sintió mejor.

Agradeció a su mamá por ayudarlo y aprendió que también es válido sentir miedo o dolor cuando nos lastimamos. Así pasaron los días, Joaquín descubriendo nuevas emociones cada vez que vivía una nueva experiencia. Aprendió que todas las emociones son válidas y que está bien sentirlas.

Y aunque algunas veces eran difíciles de manejar, siempre tenía el apoyo de su mamá para entenderlas y superarlas juntos.