Las gemelas aventureras
Era una soleada tarde de verano cuando dos niñas gemelas, Martina y Valentina, decidieron aventurarse en el bosque cercano a su casa. Empacaron algunas golosinas y se adentraron en el frondoso bosque, intrigadas por descubrir todos los secretos que guardaba.
Sin embargo, mientras exploraban, las gemelas se separaron sin darse cuenta. Cuando quisieron regresar, se encontraron completamente perdidas.
Martina empezó a llorar, pero Valentina se armó de valor y le dijo: -No llores, Marti, vamos a encontrar el camino de regreso. Juntas podemos lograrlo. Decidieron seguir caminando en busca de la salida, recordando algunas lecciones de supervivencia que habían aprendido en el colegio. Mientras tanto, sus padres, preocupados al ver que no regresaban, comenzaron a buscarlas por el bosque.
Las gemelas, por su parte, se toparon con un riachuelo y recordaron que debían seguirlo aguas abajo para encontrar la salida. Finalmente, después de diversas peripecias y desafíos, lograron reencontrarse con sus padres.
La aventura había sido aterradora, pero también habían aprendido una valiosa lección: nunca separarse y confiar en el trabajo en equipo. Desde ese día, las gemelas se convirtieron en grandes exploradoras, siempre recordando que juntas podían superar cualquier obstáculo.
FIN.