Las Guardianas del Parque

Catalina era una niña muy alegre y divertida que vivía en una casa grande con sus padres y sus dos perras, Luna y Estrella.

A Catalina le encantaba jugar con sus perras en el parque de la casa, debajo de los árboles. Un día, mientras jugaban juntas, Catalina notó que algo extraño estaba sucediendo: los árboles parecían estar enfermos. Sus hojas estaban amarillas y caídas, y algunos troncos tenían manchas oscuras.

"Mamá, papá", llamó Catalina preocupada "-Los árboles están enfermos ¿Qué podemos hacer?"Sus padres le explicaron que los árboles necesitaban cuidados especiales para recuperarse. Les dijeron que había que regarlos regularmente, podar las ramas secas y darles abono para nutrirlos.

"¡Lo haremos!" exclamó Catalina decidida "Luna y Estrella me ayudarán. "Así comenzaron a trabajar juntos para salvar los árboles del parque.

Cada día regaban las raíces de los árboles con agua fresca, quitaban las ramas secas con tijeras especiales e incluso trajeron un saco lleno de abono para esparcirlo alrededor de cada tronco.

Con el tiempo, los resultados fueron sorprendentes: Los árboles empezaron a tener hojas verdes brillantes nuevamente y se llenaron de vida gracias al esfuerzo conjunto de Catalina junto a Luna y Estrella. "¡Mira mamá! ¡Los árboles están sanos otra vez!", exclamó emocionada Catalina. "¡Lo hiciste muy bien, hija!", respondió su madre orgullosa "Nunca subestimes el poder del trabajo en equipo y el cuidado por la naturaleza.

"Desde ese día en adelante, Catalina aprendió que con dedicación y esfuerzo, podía lograr grandes cosas. Además, descubrió la importancia de cuidar el medio ambiente y ayudar a mantenerlo saludable para las futuras generaciones.

Y así, Catalina continuó jugando con sus perras bajo los árboles sanos del parque de su casa mientras disfrutaba de la belleza natural que habían logrado preservar juntos.