Las Primas en la Cima

Lupe y Luji eran dos primas muy aventureras, siempre estaban buscando algo nuevo que hacer.

Una tarde de verano, mientras jugaban en el jardín de la casa de Lupe, se les ocurrió una idea emocionante: ¡viajar a la montaña más alta que pudieran encontrar!"¿Te imaginas llegar a la cima de una montaña gigante?" dijo Lupe con entusiasmo. "¡Sería como estar en la cima del mundo!" respondió Luji animada.

Sin pensarlo dos veces, las dos pequeñas empezaron a preparar todo lo necesario para su expedición. Empacaron algunas barras energéticas, agua y un mapa que habían encontrado en internet. También llevaron ropa cómoda y abrigada porque sabían que en la montaña haría frío.

"¿Estás lista para esta aventura?" preguntó Lupe mientras miraba hacia arriba donde se veía el pico nevado de la montaña. "¡Sí! Vamos a conquistar esa montaña" exclamó Luji emocionada. Las dos niñas comenzaron su viaje temprano al día siguiente.

Caminaron por horas hasta llegar al pie de la montaña. A medida que subían, el paisaje se volvía cada vez más hermoso. Pasaron por bosques llenos de árboles altos y ríos cristalinos con peces saltando.

"Mira ese pez saltando" gritó Luji señalando hacia el río"Es impresionante" respondió Lupe maravilladaDespués de varias horas caminando llegaron a una pared vertical imponente que parecía no tener fin.

Las chicas se miraron y se dieron cuenta que tendrían que escalar para continuar su camino. "¿Crees que podemos hacerlo?" preguntó Luji con un poco de miedo. "Claro que sí, somos unas aventureras" respondió Lupe tratando de animarla. Con mucho esfuerzo y coraje, las dos primas lograron subir la pared.

Una vez arriba, continuaron caminando hasta llegar a una cueva oscura. Decidieron entrar y explorarla cuidadosamente. Adentro encontraron estalactitas y estalagmitas hermosas además de algunas criaturas extrañas como murciélagos y arañas.

"Wow, esto es increíble" dijo Lupe asombrada"Estoy un poco asustada" confesó Luji"No te preocupes, estamos juntas en esto" dijo Lupe abrazándola. Después de salir de la cueva continuaron caminando por varias horas más hasta llegar a la cima de la montaña.

Desde allí pudieron ver todo el paisaje: los ríos, los bosques y las montañas cercanas. Se sintieron muy orgullosas del trabajo que habían hecho juntas para llegar allí.

"¡Lo logramos!" gritó Luji emocionada"Sí, lo hicimos juntas" afirmó Lupe sonriendoLas dos primas aprendieron muchas cosas durante su aventura: sobre el valor del trabajo en equipo, del coraje para superar obstáculos y también sobre la belleza natural del mundo que nos rodea. Regresaron a casa felices y llenas de nuevas ideas para futuras expediciones.

La aventura les había enseñado que con esfuerzo, determinación y apoyo mutuo se pueden lograr grandes cosas.

Desde ese día, Lupe y Luji siguieron buscando nuevas aventuras juntas, sabiendo que siempre podrían contar la una con la otra para superar cualquier reto.