Las Teletubbies Maetas en la ENMJN
Era un hermoso día en el barrio de La Boca, y cuatro amigas: Silvana, Itzel, Mar y Fergie, decidieron que era hora de vivir una nueva aventura. Cansadas de la rutina y siempre buscando algo divertido, se dirigieron a la Escuela Nacional de Música Juventud Nueva (ENMJN).
Cuando llegaron, se dieron cuenta de que un evento especial estaba por comenzar: un concurso de talentos. Las cuatro amigas, que siempre buscaban hacer reír a los demás, se miraron y dijeron al unísono:
"¡Seamos las Teletubbies maetas!"
A todos les hacía reír solo el nombre, así que se pusieron manos a la obra para crear su espectáculo.
Silvana, la más creativa del grupo, se encargó de hacer los trajes coloridos. Itzel, que tenía el mejor sentido del humor, escribió un guion cómico. Mar, que tenía una voz hermosa, se encargó de las canciones, y Fergie, siempre llena de energía, entrenó a las chicas para que sus movimientos fueran los mejores.
Cada una aportó su talento, y juntas fueron creando una presentación que prometía ser inolvidable.
El día del concurso llegó, y con los trajes puestos, las chicas se alistaron detrás del escenario. Sin embargo, en el último minuto, algo inesperado sucedió.
"¿Y si no les gusta nuestra actuación?" - se preocupó Fergie.
"No, no, esto es para divertirnos, ¡no importa el resultado!" - le respondió Mar con una sonrisa.
"Además, somos las Teletubbies maetas y eso es lo que importa. ¡Divirtámonos!" - agregó Itzel, levantando el ánimo.
Cuando llegó su turno, el público estaba lleno de niños y adultos curiosos. Silvana, Itzel, Mar y Fergie comenzaron su presentación. Al principio, sus movimientos eran un poco torpes y la música estaba algo desincronizada, pero se reían entre ellas y eso contagió a todos los presentes.
"¡Vamos, Teletubbies maetas!" - gritó un niño desde el público, lo que hizo que todas soltaran una carcajada.
En un momento de su actuación, Itzel se olvidó el texto del guion y, en vez de detenerse, improvisó:
"Si no sabes bailar, ¡hace como yo!" - dijo mientras movía sus brazos.
Esto hizo que todos en la sala comenzaran a imitarla. La energía fue creciendo y pronto todos estaban bailando con las Teletubbies maetas.
Tras una actuación llena de risas, sorpresas y baile, las chicas concluyeron su show sin pensar en ganar o perder, solo disfrutando cada momento. Cuando bajaron del escenario, recibieron una lluvia de aplausos y elogios.
"¡Son unas locas!" - dijo un adulto entre risas.
"¡Quiero verlas de nuevo!" - comentó un niño levantando sus brazos.
Al final, aunque no ganaron el primer premio, sí recibieron un reconocimiento especial por ser "las más divertidas y originales".
"La verdad, lo hicimos para divertirnos y logramos eso" - dijo Silvana mientras sonreía.
"¡Sí! Eso es lo que importa" - completó Fergie.
De regreso a casa, las cuatro amigas se miraron con satisfacción. Había sido una experiencia increíble y divertida, aprendieron que lo importante no es ganar, sino disfrutar el momento y valorar la amistad.
Y así, decidieron que se harían llamar las Teletubbies maetas cada vez que se divirtieran juntas, recordarían la magia de aquel día en la ENMJN.
Fin.
FIN.