Las travesuras de Paquito en el parque



Había una vez en un barrio tranquilo de Buenos Aires, una casa con un jardín donde vivía Paquito, un perrito boxer muy juguetón y travieso.

A Paquito le encantaba salir a correr y jugar por el parque que quedaba cerca de su hogar. Siempre se metía en problemas porque era un aventurero sin límites. Una mañana soleada, Paquito salió corriendo al parque como de costumbre. Jugó con otros perros, persiguió mariposas y correteó por todos lados.

Pero de repente, se distrajo con una ardilla y cuando quiso darse cuenta, ¡se había perdido! Buscó a su dueña por todas partes pero no la encontraba.

Su dueña, llamada Martina, al darse cuenta de que Paquito no regresaba a casa, salió corriendo hacia el parque. Buscó entre los árboles, preguntó a los vecinos si lo habían visto, pero nada. Martina estaba desesperada y comenzó a llorar sin consuelo.

El sol empezaba a esconderse en el horizonte cuando Martina decidió regresar a casa con el corazón destrozado por la preocupación. Al abrir la puerta, vio algo inesperado: ¡Paquito estaba allí! Sucio y cansado, pero sano y salvo.

"¡Paquito! ¿Dónde estabas? ¡Te busqué por todas partes!", exclamó Martina entre lágrimas de emoción. Paquito movió la cola contento al ver a su querida dueña y le contó con ladridos cómo había seguido una mariposa hasta llegar a un lugar desconocido del parque donde se perdió.

Por suerte, unos niños lo ayudaron y lo guiaron de regreso a casa. Martina abrazó fuerte a Paquito mientras le daba las gracias a esos buenos niños que habían cuidado de él.

Desde ese día, Paquito aprendió que las aventuras están bien siempre y cuando se tenga cuidado y nunca se aleje demasiado de casa.

Y así fue como Paquito comprendió que la verdadera felicidad estaba junto a quienes más queremos y que aventurarse está bien siempre y cuando sea en compañía o con responsabilidad. Desde entonces, cada vez que salían al parque juntos, Paquito corría libremente pero siempre pendiente de no perderse otra vez.

Y Martina disfrutaba viendo la alegría de su fiel amigo sabiendo que juntos superaron aquel susto para convertirse en compañeros inseparables llenos de amor y diversión.

FIN.

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