Las tres amigas y el árbol caído
. Era un día soleado y perfecto para disfrutar al aire libre. Las tres amigas, Ana, Sofía y Valentina, pedaleaban alegremente por el camino del parque mientras se reían y contaban chistes.
De repente, Ana se detuvo en seco. "¡Miren chicas! ¡Hay un árbol caído bloqueando el camino!"- exclamó señalando hacia adelante. Sofía frunció el ceño preocupada. "¿Y ahora qué hacemos? No podemos pasar por encima del árbol"- dijo. Valentina sonrió con determinación.
"No te preocupes Sofi, yo tengo una idea". Las tres niñas bajaron de sus bicicletas y comenzaron a examinar el árbol caído. Era grande y pesado, pero Valentina no se dio por vencida.
"Chicas, ¿qué les parece si trabajamos juntas para mover este árbol?"- propuso Valentina con entusiasmo. Ana y Sofía miraron incrédulas a su amiga. Pero luego recordaron que juntas podían hacer cualquier cosa. Así que las tres amigas pusieron manos a la obra.
Primero intentaron empujarlo entre las tres pero fue inútil; era demasiado pesado. Entonces decidieron buscar algo que pudieran usar como palanca para levantarlo. Finalmente encontraron una rama larga y resistente que utilizaron como palanca.
Con esfuerzo lograron levantar el tronco lo suficiente como para arrastrarlo fuera del camino. "¡Lo logramos!"- gritó Ana emocionada mientras saltaba de alegría junto a sus amigas. Sofía se limpió el sudor de la frente y sonrió con orgullo.
"Sí que somos un buen equipo". Valentina asintió con una gran sonrisa en su rostro. "Exactamente, juntas podemos lograr cualquier cosa". Las tres niñas subieron a sus bicicletas y continuaron su paseo por el parque, sintiéndose más fuertes y unidas que nunca.
La lección que aprendieron ese día fue muy valiosa: cuando trabajamos juntos como equipo, podemos superar cualquier obstáculo. Y eso es algo que siempre recordarán cada vez que enfrenten un desafío en el futuro.
FIN.