Lecciones del huerto oscuro

Tomás vivía feliz en su rama, disfrutando del sol y la lluvia que lo hacían crecer fuerte y sabroso.

Sin embargo, un día, una tormenta muy fuerte azotó el huerto y Tomás fue arrancado de su rama por el viento. Voló por los aires hasta caer en un lugar desconocido. Al despertar, se encontró en medio de un bosque frondoso y oscuro. Estaba asustado y solo, pero decidió no rendirse.

Comenzó a caminar en busca de ayuda, preguntando a los animales del bosque si conocían el camino de regreso al huerto. "Hola ardilla, ¿sabes cómo puedo volver al huerto donde crecí?" -preguntó Tomás con amabilidad.

La ardilla lo miró con curiosidad y le dijo: "Sí, sí sé cómo llegar allí. Pero primero debes superar tres desafíos para demostrar tu valentía y determinación. "Tomás aceptó el reto sin dudarlo.

La ardilla le indicó el camino hacia la montaña más alta del bosque, donde tendría que escalarla para alcanzar la cima. Con esfuerzo y perseverancia, Tomás logró escalar la montaña rocosa evitando resbalar gracias a su piel brillante que lo ayudaba a agarrarse mejor.

Al llegar a la cima, se encontró con un búho sabio que le dijo: "Para continuar tu camino de regreso al huerto, deberás cruzar el río caudaloso que se encuentra al otro lado del bosque".

Sin pensarlo dos veces, Tomás se lanzó al río y luchó contra la corriente furiosa nadando con todas sus fuerzas. Logró llegar al otro lado exhausto pero lleno de determinación.

Finalmente, llegó a una pradera verde donde lo esperaba una mariposa colorida que le dijo: "Tu último desafío será encontrar la llave dorada que abrirá el portal de regreso al huerto". Tomás buscó por todos lados hasta dar con la llave dorada escondida entre las flores silvestres.

Con alegría en su corazón, abrió el portal y regresó al huerto justo a tiempo para la cosecha anual. Los demás tomates se sorprendieron al verlo volver tan radiante y lleno de historias emocionantes para compartirles sobre su aventura en el bosque.

Desde ese día, Tomás fue admirado por todos no solo por ser especial sino también por su valentía e ingenio para superar cualquier obstáculo que se interpusiera en su camino.

Y así concluyeron las aventuras del tomate Tomás quien enseñó importantes valores como la valentía y determinación a todos los habitantes del huerto.