Lili la niña que no podía dormir por las noches

Había una vez en un pequeño pueblo de Argentina, una niña llamada Lili. Desde que tenía memoria, Lili no podía dormir por las noches. Cada vez que su mamá le decía que era hora de dormir, Lili se acurrucaba en su cama pero en lugar de cerrar los ojos, empezaba a pensar:

"¿Qué pasará mañana?"

"¿Escucharán mis amigos lo que no les conté?"

"¿Habrá alguna aventura nueva que me espera?"

Y así, con su mente inquieta, se pasaba las horas mirando las estrellas desde su ventana. Pero una noche, mientras Lili contemplaba el cielo, notó que una estrella brillaba más intensamente que las demás. Intrigada, decidió hablarle.

"Hola, estrella brillante. ¿Podés ayudarme a dormir?"

La estrella, sorprendida, le respondió:

"¡Claro, Lili! Pero primero tengo una misión para vos. ¿Te gustaría ir en una aventura por el cielo?"

Sin pensarlo dos veces, Lili asintió y, de repente, se encontró flotando en el aire, rodeada de nubes y estrellas.

"¡Wow! ¿Adónde vamos?"

"Vamos a buscar el Sueño Perdido. Es un sueño muy especial que ayuda a los niños a dormir bien. ¡Pero cuidado! Hay obstáculos en el camino."

Lili se sintió emocionada. Juntas, volaron por el cielo, pasaron por sobre montañas y ríos. Sin embargo, en su ruta, se toparon con la Nube Traviesa, que comenzó a lanzarle gotas de agua a Lili.

"¡Ja, ja, ja! ¿No te cansaste de volar, pequeña?"

"No! Quiero encontrar el Sueño Perdido!"

La estrella miró a la nube y dijo:

"¡Cálmate, Nube Traviesa! Si dejas que Lili pase, prometo que un día volveremos a jugar juntos."

La Nube, intrigada por la promesa, decidió dejar pasar a Lili. Y así, continuaron su camino. Sin embargo, pronto encontraron otro obstáculo: ¡el viento fuerte!"¿Cómo podremos pasar?"

"Tendremos que unir nuestras fuerzas y hacer una linda melodía. El viento es sensible a la música."

Lili y la estrella empezaron a cantar. Con su melodía, el viento aflojó su fuerza y les permitió atravesar la tormenta.

Finalmente, llegaron a un palacio de luces donde se encontraba el Sueño Perdido. Era un hermoso sueño con un rostro amable.

"¡Aquí estoy! Gracias por venir a buscarme. Necesito volver a los niños que me necesitan."

"¿Cómo podés ayudarme a dormir, Sueño Perdido?"

"Simplemente cuando llegue a cada niño, traerá calma y paz en sus corazones para que puedan soñar. Pero primero, tendrás que confiarme tu deseo más profundo."

Lili pensó en todos sus miedos y sueños, y le dijo.

"Quiero tener calma para dormir y sentir que siempre habrá un nuevo día lleno de aventuras."

El Sueño Perdido sonrió y le dijo:

"Entonces, cada vez que te vayas a dormir, recuerda siempre que cada día es una nueva aventura. Las estrellas y los sueños están siempre contigo. Por eso, lo que importa es que sueñes y confíes."

Y así, el Sueño Perdido voló con Lili de vuelta a su casa. Al llegar, se sintió distinta.

"Ya estoy lista para dormir."

"Sabés que siempre estaré aquí para cuidarte mientras sueñas, Lili."

Esa noche, Lili se metió en su cama, sintió un calidez en su corazón y se dejó llevar por un sueño hermoso. Desde entonces, cada vez que se sentía inquieta, recordaba su aventura con la estrella y el Sueño Perdido.

Y así, con cada nueva noche, Lili siempre se preparaba para soñar. Y aprendió que dormir no solo era descansar, sino también una forma de vivir aventuras mágicas en su propia imaginación.

Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.