Lobo y el Cuervo Coripata

En lo profundo del bosque vivía un lobo llamado Lobo, conocido por su agudeza y astucia. Lobo siempre andaba en busca de aventuras y nuevos amigos. Un día, mientras caminaba por el bosque, se encontró con un cuervo llamado Coripata. Coripata era conocido por su hermoso canto y su alegría contagiosa.

Lobo, cautivado por el canto melodioso del cuervo Coripata, se acercó a él y le preguntó: - ¿Cuál es tu secreto para cantar tan bellamente, Coripata?

Coripata, con una sonrisa en el pico, respondió: - Mi secreto, Lobo, es que canto con el corazón. Dejo que mis sentimientos y emociones fluyan a través de mi canto.

Lobo, intrigado por las palabras de Coripata, le pidió que le enseñara a cantar. Coripata aceptó encantado y juntos se adentraron en el bosque para encontrar el lugar perfecto para practicar.

Durante días, Lobo y Coripata exploraron el bosque, buscando los sonidos más bellos y armónicos para integrar a su canción. Lobo aprendió a escuchar atentamente los susurros del viento, el murmullo del arroyo y el canto de las aves. Coripata, por su parte, aprendió a percibir los latidos del corazón de la naturaleza a través de la aullidos lejanos y el crujir de las hojas.

Con el tiempo, Lobo y Coripata se convirtieron en los mejores amigos, compartiendo risas, alegrías y aprendizajes. Un día, mientras cantaban juntos, un grupo de animales del bosque se acercó para escuchar su melodiosa canción. Los animales se sintieron conmovidos por la armonía y el amor que transmitían a través de su música. Lobo y el cuervo Coripata se convirtieron en los músicos favoritos del bosque.

Desde entonces, Lobo y Coripata siguieron explorando el bosque, deleitando a todos con su hermoso canto y compartiendo la lección de que la verdadera belleza está en la armonía y el amor que se encuentra en lo más profundo del corazón.