Lola, la gata campeona

Había una vez una gata llamada Lola que tenía la costumbre de dormir durante todo el día. Aunque su dueña, Sofía, le compraba juguetes y le preparaba su comida favorita, Lola prefería pasar las horas acurrucada en su cama.

Un día, mientras Sofía estaba limpiando la casa, encontró un anuncio sobre un concurso de habilidades para gatos. Decidió apuntar a Lola para ver si podían sacarla de su letargo.

Al principio, Lola no estaba muy entusiasmada con la idea. Pero cuando vio los premios que se ofrecían (una gran cantidad de golosinas), decidió darle una oportunidad. Sofía comenzó a entrenar a Lola todos los días.

Le enseñó trucos como saltar obstáculos y caminar por una cuerda floja. Al principio fue difícil para Lola, pero poco a poco empezó a mejorar. Un día antes del concurso, Sofía llevó a Lola al parque para practicar sus habilidades al aire libre.

Pero justo cuando estaban ensayando uno de los trucos más difíciles (saltar por un arco), apareció otro gato callejero y comenzaron a pelearse. "-¡Lola! ¡Deja eso ahora mismo!"- gritó Sofía mientras intentaba separarlas.

Pero era demasiado tarde: el arco se había roto en mil pedazos y el concurso era al día siguiente. ¿Cómo iba a ganarlo ahora? Sofía estaba muy preocupada pero entonces recordó algo importante: lo más importante no es ganar sino hacer lo mejor posible y divertirse en el proceso.

Así que decidió llevar igualmente a Lola al concurso. Cuando llegaron, Lola estaba un poco nerviosa. Pero cuando vio a los demás gatos haciendo sus trucos, comenzó a relajarse y a disfrutar del evento.

Cuando le tocó el turno de demostrar sus habilidades, Lola lo hizo increíblemente bien. Aunque no ganaron el primer lugar, Sofía se sintió muy orgullosa de Lola por haberlo intentado y haberse esforzado tanto.

Y desde ese día en adelante, la gata que antes dormía todo el día ahora estaba llena de energía y siempre lista para aprender algo nuevo. .