Los Amigos Inseparables

Había una vez, en un colegio de la ciudad, cuatro amigos muy traviesos: Vinicius, Vitor, Nicolás y yo. Nos gustaba jugar y reírnos todo el tiempo, pero siempre nos metíamos en problemas por nuestras travesuras.

A pesar de que éramos un poco desordenados y nos equivocábamos mucho en clase, nuestros profesores siempre destacaban que éramos muy inteligentes. Pero había algo que me preocupaba: mis amigos sacaban mejores notas que yo.

Un día después de clases, nos reunimos en el parque para jugar al fútbol. Yo estaba un poco triste porque acababa de recibir mi boletín de notas y no eran tan buenas como las de mis amigos.

- ¿Qué te pasa amigo? - preguntó Vitor al notar mi rostro triste. - Es que mis notas no son tan buenas como las suyas - respondí con tristeza. Vinicius se acercó a mí y me dijo:- No te preocupes amigo. Las notas no lo son todo.

Lo importante es seguir intentando mejorar cada día. Nicolás asintió con la cabeza:- Sí. Además, nosotros también nos equivocamos mucho en clase pero seguimos estudiando para mejorar.

Me sentí mejor al escuchar sus palabras sabias y decidí seguir su consejo para mejorar mis notas. Empecé a estudiar más duro y a prestar más atención en clase. Un día después del examen final del trimestre, recibimos nuestros resultados.

Para mi sorpresa, había logrado obtener una nota alta gracias a mi esfuerzo extra. Cuando les mostré mi resultado a mis amigos ellos se pusieron muy contentos por mí:- ¡Felicidades! - exclamó Vitor. - Sabíamos que podías hacerlo - dijo Nicolás.

Desde ese día, aprendimos que la amistad y el apoyo mutuo son más importantes que las notas. Y aunque nos sigamos equivocando de vez en cuando, siempre seguiremos intentando mejorar juntos.