Los capibaras y la lección de la envidia

En las tranquilas orillas de un río en la selva, vivían cinco amigos capibaras: Martín, Sofía, Lucas, Valeria y Tomás. Ellos eran inseparables y siempre se divertían juntos. Un día, llegó al río un nuevo capibara llamado Esteban.

Esteban era muy listo y rápidamente se convirtió en el centro de atención de todos los animales de la selva. Los amigos capibaras comenzaron a sentir envidia de Esteban, ya que todos los demás animales hablaban de lo increíble que era.

"Estoy cansado de que todos hablen solo de Esteban. Antes éramos los más populares", se quejó Martín. "Sí, es injusto. Él acapara toda la atención", agregó Valeria. Los amigos capibaras estaban tristes y confundidos.

Decidieron visitar a Eugenio, un sabio búho de la selva, en busca de consejo. Eugenio les explicó que la envidia era como un veneno que no solo dañaba su amistad, sino también su corazón. Los amigos capibaras entendieron que la envidia no los llevaba a ningún lado.

Decidieron enfrentar esta situación con valentía y superarla juntos. Así, organizaron un evento para mostrar todas las habilidades y talentos que poseían. Invitaron a todos los animales de la selva, incluyendo a Esteban.

El evento fue un éxito y los amigos capibaras recordaron lo divertido que era estar juntos. Pronto, los demás animales volvieron a hablar de ellos y la envidia desapareció.

A partir de ese día, los amigos capibaras aprendieron que la verdadera felicidad no provenía de la atención de los demás, sino de su amistad y la confianza mutua. Esteban también se unió al grupo y juntos vivieron muchas aventuras, fortaleciendo aún más su amistad.