Los Catorce Meses de Luna
Había una vez en un reino lejano, un lugar mágico donde el tiempo era medido de una manera muy especial. Allí, los meses del año eran catorce, y estaban llenos de colores y festividades. Cada mes era un tiempo para celebrar algo único.
El primer mes se llamaba Janus, el del nuevo comienzo, y todos se vestían de blanco para recibirlo. El segundo era Febris, lleno de fiestas de primavera, con flores que brotaban por todas partes. Luego venían Marz, Abrile y Mayo, cada uno con sus propias tradiciones y personas que se vestían con disfraces de acuerdo a la temporada.
Pero lo que realmente diferenciaba este reino era la relación entre los meses. Todos los meses eran amigos, pero había un mes, llamado Solsticio, que se sentía un poco aislado. Solsticio era un mes brillante, lleno de luz y calidez, pero con el paso del tiempo, se sintió como que su luz opacaba a los demás meses.
"¡Yo soy el mejor, el más luminoso!" - decía Solsticio, mientras presumía de sus días soleados.
Los otros meses empezaron a sentir que Solsticio acaparaba demasiado la atención. Una tarde, mientras se reunían en una colina, Febris habló y dijo:
"Quizás si Solsticio dejara brillar un poco a otros meses, podríamos tener un año más armonioso".
Marz, que siempre había sido el pacificador, asintió y propuso:
"¿Y si hacemos un día especial donde cada mes comparta su luz?".
La idea emocionó a muchos, así que acordaron establecer un día donde cada mes sería el centro de atención. Sin embargo, Solsticio se sintió herido por la propuesta:
"¿Por qué no puedo ser el rey todo el tiempo?" protestó, con un brillo de tristeza en sus ojos.
Los otros meses se sacudieron, sintiéndose culpables. Era un mes muy querido, pero su actitud estaba opacando la belleza del resto. Así que decidieron hacer una reunión en el gran árbol de la sabiduría para hablar del asunto.
Cuando llegó el día, participaron todos los meses, incluso Solsticio que finalmente se dio cuenta de que la amistad y la celebración compartida eran más importantes que ser el mes más destacado. Marz tomó la palabra:
"Querido Solsticio, tu luz es maravillosa, pero sería aún más hermosa si la compartís con nosotros".
Finalmente, Solsticio suspiró y dijo:
"Tenés razón, mis amigos. A veces me olvidé que si todos brillamos juntos, la luz puede ser aún más brillante."
Así, comenzaron a celebrarse juntos, con el Solsticio siendo parte de una gran fiesta de unión. Pero no todo concluyó ahí, pues el rey del año, que vigilaba el reino, decidió que el tiempo debía ser organizado de otra manera. Así que convocó a todos los meses:
"Desde ahora, solo habrá doce meses. Los catorce meses eran demasiado para el ritmo del reino. Cuando sumamos las cuentas, los días no se alineaban bien".
Los meses se miraron entre sí, preocupados, y Solsticio dijo:
"Quizá podamos darle forma a nuestra identidad en 12 meses, pero haciendo que cada uno sea especial".
Así, decidieron fusionarse y crear nombres nuevos para los meses. Se dieron cuenta de que la comunidad era más fuerte que la individualidad. Después de muchas charlas, decidieron tomar lo mejor de cada mes, y en un día soleado, el rey anunció:
"¡Presentamos a los nuevos meses del año! Yanero, Febrero, Marzo, Noviembre, Diciembre, y otros que surgieron de las ideas de los anteriores. ¡Celebrate la luz que cada uno tiene para compartir!"
Así fue como la historia de los catorce meses se convirtió en una hermosa leyenda en el reino de Luna. Aunque ahora eran solo doce, su amistad y su luz brillaban más que nunca. Desde entonces, cada año el reino celebraba una gran fiesta al final de diciembre, uniendo los recuerdos de cada mes en una celebración de amor y compañerismo. Y así, los meses aprendieron que cuando todos se unen y comparten su luz, el mundo se ilumina con colores hermosos. La belleza de la amistad vale más que cualquier título.
Fin.
FIN.