Los cavernícolas valientes

Hace mucho, mucho tiempo, en una cueva escondida entre las montañas, vivía una familia de cavernícolas. El papá Neandertal se llamaba Ug, la mamá Neandertal se llamaba Aga, y su pequeña hija se llamaba Uga. Ellos vivían como cualquier otro cavernícola, cazando mamuts, recolectando frutas y defendiéndose de los peligros que acechaban en la oscuridad de la cueva.

Un día, mientras Ug y Uga estaban cazando, un poderoso terremoto sacudió la tierra. La cueva de su familia quedó sepultada bajo toneladas de rocas, y Ug y Uga quedaron atrapados afuera. Aga estaba atrapada dentro de la cueva, y no podían rescatarla. Ug y Uga estaban desesperados, pero no perdieron la esperanza. Decidieron ir en busca de ayuda, sabiendo que el viaje sería peligroso.

Durante su travesía, se enfrentaron a bestias feroces, cruzaron ríos turbulentos y escalaban montañas empinadas. Pero nunca se dieron por vencidos. Finalmente, llegaron a una tribu vecina y pidieron ayuda. Con valentía, un grupo de cavernícolas se unió a Ug y Uga para rescatar a Aga de la cueva.

Después de días de esfuerzo y trabajo en equipo, lograron liberar a Aga de la cueva. La familia, finalmente reunida, se abrazó con alegría. Ug, Aga y Uga aprendieron que, con valentía, determinación y trabajo en equipo, podían superar cualquier desafío.

A partir de ese día, la tribu entera los llamó 'Los cavernícolas valientes' y su valentía se convirtió en leyenda. Ug, Aga y Uga vivieron felices y se convirtieron en ejemplos para toda la tribu de lo que se puede lograr cuando se es valiente y se trabaja en equipo.