Los extraterrestres del arcoíris
Había una vez, en un planeta muy lejano, unos simpáticos extraterrestres llamados Zippy, Fluffy y Spark. Ellos vivían en un mundo en blanco y negro donde todo era aburrido y monótono.
Un día, decidieron emprender un viaje en su nave espacial para explorar otros planetas y descubrir nuevas aventuras. Después de recorrer el espacio durante días, finalmente llegaron a la Tierra.
Al aterrizar, algo increíble sucedió: ¡los tres extraterrestres comenzaron a brillar con diferentes colores! Zippy se volvió amarillo como el sol, Fluffy se tornó rosa como una flor y Spark se iluminó de azul como el cielo. "¡Ohhh! ¡Miren qué bonitos colores tenemos ahora!" exclamó emocionado Zippy.
"¡Sí! Parece que este planeta nos ha dado un regalo especial", dijo Fluffy maravillada. Los tres amigos empezaron a explorar la Tierra con asombro. Descubrieron campos verdes, flores rojas, océanos azules y montañas marrones. Cada nuevo color los llenaba de alegría y emoción.
"¡Qué divertido es aprender sobre los colores!" dijo Spark entusiasmado. Poco a poco, fueron conociendo a los habitantes del planeta Tierra: humanos de piel beige, animales animals de distintos tonos y plantas de colores vibrantes.
Los extraterrestres no paraban de sorprenderse ante tanta diversidad cromática. Un día, mientras paseaban por un hermoso bosque verde, escucharon risas provenientes de un grupo de niños que jugaban juntos. "¡Hola! ¿Quiénes son ustedes?" preguntó curioso Zippy acercándose a los pequeños.
"¡Wow! ¡Son extraterrestres de colores!" exclamaron los niños sorprendidos. Los niños se acercaron con curiosidad hacia Zippy, Fluffy y Spark.
Los extraterrestres les contaron sobre su viaje interestelar y cómo habían adquirido sus nuevos tonos brillantes al llegar a la Tierra. Los pequeños estaban fascinados con la historia y querían ser amigos de estos seres tan especiales. "¿Quieren jugar con nosotros?" propuso uno de los niños entusiasmado.
Zippy, Fluffy y Spark aceptaron encantados la invitación. Jugaron juntos toda la tarde: corrieron por el campo verde, saltaron en charcos azules e hicieron castillos con arena amarilla. Los colores refulgentes de los extraterrestres hacían que cada juego fuera aún más divertido y mágico.
Al caer la noche, todos se despidieron con una gran sonrisa en el rostro.
Los tres amigos alienígenas subieron a su nave espacial llena de gratos recuerdos e ilusiones por seguir explorando el universo lleno de color que acababan de descubrir en la Tierra. Y así fue como Zippy, Fluffy and spark aprendieron sobre los colores gracias a las experiencias vividas junto a sus nuevos amigos terrestres.
Desde ese día, cada vez que veían una estrella fugaz cruzando el cielo recordaban aquella aventura inolvidable donde encontraron no solo nuevos tonos sino también grandes amistades.
FIN.