Los gatitos valientes
En un pequeño pueblo vivían tres gatitos: Tito, Lila y Max. Tito era el más trabajador de los tres, siempre ayudando a su madre en las tareas del hogar y buscando comida para la familia.
Por otro lado, Lila y Max eran bastante vagos y preferían pasar el día durmiendo en el sol. Un día, mientras Tito estaba en busca de comida para su familia, Lila y Max decidieron ir a explorar el bosque cercano al pueblo.
Pero no se dieron cuenta de que estaban entrando en una zona peligrosa donde habían cazadores furtivos. De repente, escucharon un ruido fuerte seguido de un disparo. Lila se asustó muchísimo y corrió hacia atrás tratando de escapar.
Sin embargo, Max no tuvo la misma suerte ya que fue alcanzado por una bala perdida. Cuando Tito regresó a casa con la comida que había conseguido para su familia, encontró a su madre muy preocupada por sus hermanos desaparecidos.
Con lágrimas en los ojos le contaron lo ocurrido con Max. Tito decidió salir inmediatamente en busca de sus hermanos desaparecidos. Caminó durante horas hasta que finalmente encontró a Lila llorando junto al cuerpo herido de Max.
Con mucho esfuerzo logró cargar con su hermano herido sobre sus hombros llevándolo hasta casa donde recibió cuidados médicos apropiados hasta recuperarse completamente.
Mientras tanto, Lila aprendió una lección importante acerca del valor del trabajo duro después de haberse dado cuenta del gran esfuerzo que había hecho Tito para encontrarlos y salvar a Max. Finalmente, los tres gatitos aprendieron la importancia del trabajo duro y de no ser vagos como Lila y Max.
Ahora trabajan juntos para ayudar a su madre en las tareas del hogar y siempre están atentos a cualquier peligro que pudiera amenazarlos.
La moraleja de esta historia es que el trabajo duro siempre tiene recompensas, ya sea en forma de éxito o en momentos difíciles donde se necesita ayuda.
FIN.