Los Guardianes de los Elementos
En un rincón lejano del mundo, existía un mágico lugar llamado Elementaria, donde los cuatro elementos dominaban la vida: Agua, Tierra, Aire y Fuego. Cada uno de ellos tenía su propio hogar y cuidaban del planeta con gran esmero.
El Agua, un ser chispeante y alegre, vivía en un hermoso río que serpenteaba por los verdes campos. Tierra, un robusto pero amable gigante, se paseaba por las montañas cubiertas de flores. Aire, un pequeño y travieso duende, volaba libre por los cielos, mientras que Fuego, un dragón colorido y brillante, danzaba alegremente entre las llamas.
Un día, Fuego se encontró con un extraño grupo de sombras que querían destruir el planeta. "¿Qué hacen aquí?"- preguntó Fuego con desconfianza. "Venimos a quemar todo y a crear un mundo sólo de fuego"- respondió la sombra líder, una criatura oscura llamada Sombra X.
Los cuatro elementos se reunieron de inmediato para discutir la amenaza. "¡No podemos dejar que eso suceda!"- dijo Agua. "Sí, nuestras diferencias nos hacen fuertes. Juntos podemos detenerlos"- añadió Tierra.
"Pero, ¿cómo?"- preguntó Aire, volando alrededor de ellos. "Hagamos una competencia"- propuso Fuego, moviendo su cola con entusiasmo. "Si ganamos, Sombra X tendrá que marcharse y nunca volver"-.
Los elementos acordaron hacer una serie de juegos y desafíos, donde cada uno mostraría su poderoso talento. La primera prueba fue arrastrar un enorme tronco de un lado a otro de la playa. Tierra, muy fuerte, levantó el tronco con su fuerza. "¡Esto es un paseo!"- gritó mientras lo llevaba fácilmente.
La segunda prueba fue hacer volar una cometa hasta las nubes. Aire, que era pequeño pero ágil, levantó la cometa con su soplo gentil. "¡Mirá cómo vuela!"- exclamó divertido mientras el resto lo aplaudía.
La tercera y última prueba era construir una represa en el río. El Agua, moviéndose de un lado a otro, utilizó su ingenio para crear una represa perfecta, mientras Tierra ayudaba a colocar las rocas más grandes. Todos estaban emocionados al ver cómo el agua se mantenía en su lugar, protegiendo a los pequeños animais del bosque.
Finalmente, llegó el momento de la verdad: Sombra X observaba con recelo. "Veo que son buenos, pero yo soy más poderoso"- dijo, tratando de intimidarlos. "¡Pero no tan poderosos como nosotros juntos!"- respondió Fuego, con una llama brillante en su cola.
En ese instante, los cuatro elementos unieron sus fuerzas. Agua llenó el aire de vapores, Tierra levantó rocas, Aire creó una enorme tormenta e hizo que Fuego bailara en una coreografía mágica, iluminando la noche con destellos de colores. La Sombra X se asustó y rápidamente se desvaneció en la oscuridad.
."¡Lo logramos!"- gritaron todos.
Desde ese momento, los cuatro elementos formaron una amistad inquebrantable, y nunca volvieron a tener miedo de las sombras. Además, aprendieron que su diversidad era su mayor fortaleza y que juntas podían hacer cosas increíbles.
Y así, en Elementaria, Agua, Tierra, Aire y Fuego continuaron protegiendo el planeta, enseñando a todos que abrazar las diferencias era la clave para un mundo lleno de alegría y amor.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
FIN.