Los Guardianes del Bosque
En la escuela "Sueños de Colores" había un grupo de niños muy especiales. Había Lucas, el más inteligente de la clase; Valentina, la más creativa; Martín, el más divertido; Sofía, la más amable; y Tomás, el más curioso.
A pesar de sus diferencias, todos eran buenos amigos y se llevaban muy bien. Un día, la maestra Laura les propuso hacer un proyecto en equipo.
Debían investigar sobre los animales de la selva y preparar una presentación para exponer frente a toda la escuela. Los niños estaban emocionados con el desafío y se pusieron manos a la obra. - ¡Vamos a ser los mejores! -exclamó Lucas con entusiasmo.
- Sí, pero necesitamos organizarnos bien para que todo salga perfecto -agregó Valentina. Los días pasaron y cada uno asumió un rol dentro del grupo.
Lucas se encargaba de investigar datos interesantes sobre los animales, Valentina dibujaba hermosas ilustraciones para acompañar la presentación, Martín preparaba chistes para hacer reír a todos, Sofía ayudaba a coordinar las ideas y Tomás buscaba videos educativos para complementar la información. Poco a poco, el proyecto fue tomando forma y los niños se dieron cuenta de lo mucho que podían aprender trabajando juntos.
Descubrieron que cada uno tenía habilidades únicas que complementaban las de los demás y que juntos eran imparables. Finalmente llegó el día de la presentación.
El auditorio estaba lleno de padres, maestros y compañeros expectantes por ver el trabajo de los niños. Cuando les tocó el turno, subieron al escenario con seguridad y comenzaron su exposición. - En la selva viven animales increíbles como el jaguar, que es un excelente cazador -comenzó Lucas.
- Y también están los loros coloridos que alegran nuestros bosques con sus cantos -agregó Valentina mostrando sus dibujos. - ¡Y no podemos olvidarnos del mono travieso que siempre está buscando aventuras! -intervino Martín haciendo reír a todos. La presentación fue todo un éxito.
Los niños recibieron aplausos y felicitaciones por parte de todos los presentes. La maestra Laura se acercó orgullosa a ellos y les dijo:- Estoy muy impresionada por su trabajo en equipo.
Han demostrado que juntos pueden lograr grandes cosas cuando se apoyan mutuamente. Los niños sonrieron felices sabiendo que habían hecho un gran trabajo gracias a su colaboración y amistad.
Desde ese día, siguieron trabajando juntos en nuevos proyectos donde siempre ponían en práctica lo aprendido: que cuando se trabaja en equipo y se ayuda al prójimo, ¡todo es posible!
FIN.