Los Guardianes del Bosque Encantado

Había una vez un niño llamado Lucas, a quien le encantaba explorar y descubrir cosas nuevas.

Un día, decidió aventurarse en el bosque que estaba cerca de su ciudad, a pesar de las advertencias de sus padres sobre lo peligroso que podía ser. Al adentrarse en el bosque, Lucas caminaba maravillado por la diversidad de árboles, plantas y sonidos naturales que lo rodeaban. De repente, tropezó con una raíz y cayó al suelo golpeándose la cabeza.

Se desmayó por un momento. Cuando despertó, se encontró rodeado por tres animales: un zorro astuto, un búho sabio y una ardilla traviesa.

Al principio, Lucas sintió miedo al ver a los animales tan cerca de él y además porque podía entender lo que decían. "¿Está bien?", preguntó el zorro con voz amable. "Sí, solo me golpeé un poco", respondió Lucas sorprendido. "No deberías estar aquí solo", advirtió el búho con voz grave.

"Es peligroso para los humanos perdidos en nuestro bosque", agregó la ardilla juguetona. Lucas se asustó aún más al escuchar a los animales hablar como si fueran personas. Se levantó rápidamente y comenzó a alejarse corriendo del lugar. Los animales intentaron detenerlo sin éxito.

El niño llegó a casa agitado y contó a sus padres lo ocurrido en el bosque. Ellos no le creyeron y pensaron que era sólo producto de su imaginación.

Sin embargo, Lucas sabía muy bien lo que había vivido. Los días pasaron y Lucas no dejaba de pensar en los animales del bosque. Decidió regresar para enfrentar su miedo y descubrir por qué podía entenderlos.

Al llegar al mismo lugar donde se desmayó, vio nuevamente al zorro, al búho y a la ardilla esperándolo. "¿Por qué huyes? Somos tus amigos", dijo el zorro con sinceridad. "Te necesitamos para proteger nuestro hogar", agregó el búho con sabiduría.

"Y también para enseñarte cómo cuidar la naturaleza", finalizó la ardilla con picardía. Lucas comprendió entonces que debía superar su temor inicial para aprender cosas nuevas y ayudar a los seres vivos del bosque.

A partir de ese día, se convirtió en el guardián del bosque junto a sus amigos animales.

Así, Lucas aprendió valiosas lecciones sobre el respeto hacia la naturaleza, la importancia de enfrentar nuestros miedos y la amistad inesperada entre especies diferentes pero unidas por un objetivo común: cuidar el mundo en el que todos vivimos juntos. Y colorín colorado este cuento ha terminado ¡Cuidemos nuestro planeta!