Los Moutros de Colores
En un lejano valle llamado Arcoirisia, vivían los Moutros de Colores, unas criaturas mágicas con la habilidad de cambiar de color según su estado de ánimo.
Había Moutros rojos cuando estaban enojados, Moutros azules cuando estaban tristes, Moutros verdes cuando estaban envidiosos y Moutros amarillos cuando estaban felices. Un día, la tranquilidad en Arcoirisia se vio amenazada por la llegada de los Grisotes, unos seres grises y gruñones que intentaban apagar todos los colores del valle.
Los Moutros de Colores se pusieron nerviosos y tristes al ver cómo su hogar se volvía gris. "¡Tenemos que hacer algo, amigos!" exclamó el Moutro amarillo, tratando de mantener su buen ánimo.
"¡No podemos dejar que nos quiten la alegría y el color!" agregó el Moutro rojo, con determinación. Los Moutros de Colores se unieron en un plan para recuperar la alegría y los colores de Arcoirisia.
Descubrieron que el secreto para vencer a los Grisotes estaba en el poder de su propia alegría y optimismo. Con risas, abrazos y palabras de aliento, los Moutros de Colores lograron poco a poco devolverle la vida y el color al valle.
Los Grisotes, al ver la felicidad y el brillo de Arcoirisia, no pudieron resistirse y se convirtieron en seres coloridos también. Desde entonces, en el valle de Arcoirisia reinaba la alegría, la solidaridad y la diversidad de colores.
Los Moutros de Colores supieron que, con amor y optimismo, podrían superar cualquier desafío y mantener siempre vivo el arcoíris en sus corazones.
FIN.