Los mundos de Lola

Había una vez una niña llamada Lola, que cada noche a su cama volaba sola. Después de cenar, se iba a dormir, y en sueños vivía aventuras sin fin.

Una noche en particular, algo especial sucedió,en su sueño tres puertas aparecieron como un trío. Lola curiosa decidió explorar, y detrás de cada puerta algo nuevo iba a encontrar. La primera puerta era roja y brillante, al abrirla encontró un mundo fascinante.

Un libro gigante flotando en el aire, le susurraba historias sin parar. "Hola Lola", dijo el libro con alegría,"si me lees aprenderás cada día". Lola sonrió y comenzó a leer, descubriendo que los libros la podían sorprender. La segunda puerta era azul y reluciente, y al cruzarla vio un paisaje diferente.

Árboles altos y coloridos animales, todos cantaban en coros musicales. "Bienvenida Lola", las aves gorjeaban contentas,"a nuestro bosque lleno de cuentos y leyendas". Lola bailó con los animales sin cesar, aprendiendo que la música puede inspirar.

Finalmente llegó a la tercera puerta dorada, deteniendo su paso con mirada asombrada. Un espejo gigante reflejaba su imagen, pero algo distinto pasaba en ese viaje. Dentro del espejo vio a otra niña igual a ella, triste y solitaria, necesitando ayuda sincera.

"¿Quién eres?", preguntó Lola preocupada"Soy tu reflejo olvidado", respondió la niña añorada. Lola entendió que debía amarse a sí misma primeropara poder ayudar al otro compañero. Abrazó al reflejo con amor profundosintiendo que había aprendido este segundo mundo.

Al despertar al día siguiente, recordaba su sueño con emociónhabía descubierto valiosas lecciones en esa ocasión. Los libros enseñan, la música inspira tambiény amarse a uno mismo es lo más importante siempre también.

Así termina esta historia llena de magia y colordonde Lola descubrió que el conocimiento es un tesoro de valor. Y tú pequeño lector que escuchaste hasta el finalrecuerda estas lecciones para ser feliz como principal.