Los niños gigantes y la paz en el mundo

Había una vez un mundo donde los niños, al crecer, se convertían en gigantes. Estos gigantes solían pelear entre ellos, causando mucha destrucción.

Pero un día, dos hermanos gigantes, Julián y Valentina, que habían sido niños muy curiosos y amigables, decidieron que no querían seguir peleando. -¿Por qué peleamos, hermano? -preguntó Valentina. -No lo sé... es solo lo que siempre se ha hecho -respondió Julián con tristeza. Decidieron entonces emprender un viaje por el mundo para buscar una solución.

En su camino, se encontraron con otros gigantes, quienes se burlaron de ellos por querer paz en lugar de guerra. Pero Julián y Valentina no se rindieron, y poco a poco fueron ganando aliados.

Con el tiempo, lograron convencer a la mayoría de los gigantes de que la paz era el camino a seguir. Organizaron eventos pacíficos, enseñaron valores de respeto y empatía, y finalmente lograron que los gigantes dejaran de pelear.

El mundo empezó a cambiar, y los niños pequeños crecían con el ejemplo de paz de los gigantes. Pronto, toda la sociedad se transformó, y las guerras quedaron en el olvido. Julián y Valentina se convirtieron en leyendas, recordados por su valentía y determinación en busca de la paz.

Y así, gracias a la voluntad de dos niños gigantes, el mundo encontró la armonía que tanto había anhelado.