Los Piratas y el Tesoro de la Isla
Era un brillante día en el mar, y la tripulación del famoso pirata Barba Roja navegaba en su barco, el —"Valiente" , en busca de un tesoro escondido en una isla lejana.
"¡Capitán!", gritó el joven grumete Timi mientras miraba a través de su catalejo. "¡Allí está la isla!". Barba Roja, con su gran sombrero y su barba enredada, sonrió de oreja a oreja. "¡Es hora de buscar el tesoro!", exclamó.
Al llegar a la isla, se dieron cuenta de que no estaban solos. Un grupo de piratas rivales había llegado primero y ya estaban tratando de abrir el cofre del tesoro. "¡No se lo permitiré!", gritó Barba Roja. "¡A luchar, muchachos!".
Los
dos grupos empezaron a pelear, pero Timi tuvo una idea. "¡Espera! ¿Por qué no hacemos una votación para decidir quién se queda con el tesoro?". Barba Roja se detuvo, pensando en la propuesta. "¿Y si armamos un trato?", sugirió uno de los piratas rivales, que se presentó como Timón.
Al final, decidieron que compartirían el tesoro y lo usarían para ayudar a los niños de un pueblo cercano. Todos se pusieron de acuerdo y sonrieron, conscientes de que la amistad era más valiosa que el oro.
Tras la aventura, los piratas volvieron a zarpar en su barco, el —"Valiente" , felices de haber encontrado no solo un tesoro, sino también una nueva amistad.
FIN.