Los poderes mágicos de Lía
En un reino mágico, Lía, una niña con dislexia, poseía una habilidad especial: podía ver y manipular las palabras como si fueran objetos físicos. A pesar de esto, la gente a menudo se burlaba de ella y la subestimaba.
Un día, la malvada hechicera del reino, Celinda, lanzó un hechizo que hizo que todas las palabras desaparecieran del reino, sumiéndolo en el caos. Lía, con sus habilidades especiales, se dio cuenta de la desaparición de las palabras y decidió actuar.
Descubrió que aún podía ver las palabras mientras los demás no podían. Con valentía, se propuso encontrar la forma de devolver las palabras al reino.
Lía se adentró en el peligroso bosque encantado, donde se encontró con un simpático hada llamado Paco. Al explicarle su problema, Paco le confesó que conocía a la hechicera Celinda y le dio direcciones para llegar a su guarida. Lía siguió las instrucciones de Paco y finalmente encontró a Celinda.
Usando su habilidad para manipular palabras, creó un hechizo que deshizo el maleficio de Celinda y restauró las palabras al reino. La gente se dio cuenta de la importancia de las habilidades especiales de Lía y comenzaron a apreciarla.
Desde ese día, Lía se convirtió en la guardiana de las palabras del reino, asegurándose de que nunca desaparecieran de nuevo.
FIN.