Los Sueños de la Escuela Especial



Había una vez en Mar del Plata, una escuela muy especial donde diez alumnos curiosos y llenos de energía asistían a clases con la Seño Camila.

Un día, cuando se acercaba el Día del Trabajador, la Seño Camila decidió enseñarles a sus alumnos la importancia de esta fecha. - ¡Buenos días, chicos! Hoy vamos a hablar sobre el Día del Trabajador. ¿Alguien sabe por qué es tan importante? -preguntó la Seño Camila.

Los alumnos se miraron entre ellos y levantaron tímidamente las manos.

Bianca V levantó un poco más la mano y dijo:- El Día del Trabajador es importante porque se celebra el esfuerzo y la dedicación de todas las personas que trabajan duro para ayudar a sus familias y hacer crecer al país. La Seño Camila asintió con una sonrisa y les explicó más sobre el valor del trabajo honesto y cómo cada persona, sin importar su labor, contribuye al bienestar de todos.

Los niños escuchaban atentamente, impresionados por lo que estaban aprendiendo. Después de esa clase tan especial, los diez alumnos comenzaron a reflexionar sobre lo que les gustaría ser cuando fueran grandes.

Yamil levantó la mano emocionado y compartió su sueño:- ¡Yo quiero ser bombero para salvar vidas y proteger a las personas en peligro! David también estaba entusiasmado y dijo:- A mí me encantaría ser veterinario para cuidar a los animales enfermos y darles mucho amor.

Morena no se quedó atrás y expresó:- Yo quiero ser maestra como vos, Seño Camila, para enseñar a otros niños cosas bonitas como hoy nos enseñaste tú.

Camila los miraba orgullosa mientras Alan mencionaba que quería ser chef para cocinar platos deliciosos; Daiana soñaba con ser diseñadora de moda; Bianca S quería convertirse en astronauta; Enzo deseaba trabajar como ingeniero; Genaro anhelaba ser futbolista profesional; mientras que Bianca V confesó su deseo de convertirse en médica pediatra.

La Seño Camila sonrió ante tantas ilusiones y les dijo:- Chicos, recuerden que pueden lograr cualquier cosa si trabajan duro por ello. No hay límites para sus sueños si creen en ustedes mismos.

Desde ese día, los diez alumnos se comprometieron a esforzarse al máximo en sus estudios para alcanzar sus metas. Cada uno sabía que el camino no sería fácil, pero con determinación y pasión podrían llegar lejos.

Y así, en aquella escuela de Mar del Plata, diez corazones rebosantes de sueños e ilusiones aprendieron sobre la importancia del trabajo honrado y descubrieron que el futuro estaba lleno de posibilidades esperando por ellos. Con la guía amorosa de la Seño Camila, aquellos pequeños gigantes estaban listos para enfrentar cualquier desafío con valentía y optimismo.

FIN.

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