Los Superlimpiadores Bondadosos

te y hacer del mundo un lugar mejor. Un día, mientras paseaba con Toby y Mitzy por el parque, Agustina notó que había mucha basura tirada en el suelo.

Se acercó a una lata de basura para tirar un papel y vio que estaba desbordando de desperdicios. "¡Oh no! Hay demasiada basura aquí", dijo Agustina preocupada.

Toby se acercó a ella y le dio una patita en la mano para animarla, mientras Mitzy maullaba fuerte como si estuviera diciendo "podemos hacer algo al respecto". Entonces, Agustina decidió utilizar sus superpoderes para limpiar el parque.

Con un movimiento de su mano, creó un gran remolino de aire que recogió toda la basura del suelo y la llevó hasta las latas de basura vacías. Los pájaros cantaron felices mientras veían cómo Agustina hacía magia con sus poderes.

Pero entonces, algo extraño pasó: una enorme nube negra apareció en el cielo y empezó a descargar lluvia torrencial sobre ellos. La lluvia era tan fuerte que los árboles se sacudían y las flores se escondían bajo tierra. "¡Necesitamos encontrar refugio!", gritó Agustina mientras corría hacia un pequeño cobertizo cerca del camino.

Toby y Mitzy corrieron detrás de ella lo más rápido que pudieron. Una vez dentro del cobertizo, descubrieron que había alguien más allí: era una abuela muy amable llamada Doña Rosa. "Hola niños ¿están bien?", preguntó Doña Rosa con una sonrisa. "Sí, gracias.

¿Y usted?", respondió Agustina. "Estoy bien, solo un poco mojada", dijo Doña Rosa riendo. Agustina se dio cuenta de que Doña Rosa estaba sola y decidió hacer algo especial por ella.

Con otro movimiento de su mano, creó una manta caliente y seca para la abuela. "¡Oh mi querida! ¡Eres un ángel!", exclamó Doña Rosa sorprendida mientras se cubría con la manta. La lluvia finalmente cesó y Agustina, Toby, Mitzy y Doña Rosa salieron del cobertizo.

El sol brillaba en el cielo y los pájaros cantaban de nuevo. "Muchas gracias por ayudarme", dijo Doña Rosa agradecida. "No hay problema", respondió Agustina sonriendo. De repente, Toby empezó a ladrar hacia un lado del parque.

Cuando Agustina miró en esa dirección, vio que había una niñita perdida buscando a su mamá entre la multitud de personas que estaban allí disfrutando del día soleado.

Agustina no dudó ni un segundo más: utilizó sus superpoderes para encontrar a la madre de la niñita perdida. Con su vista de rayos X pudo verla rápidamente detrás de los árboles cercanos al lago del parque.

Corrió hacia allí junto con Toby y Mitzy llevando consigo a la pequeñita hasta reunirla con su mamá muy feliz por haberla encontrado sana y salva. Doña Rosa observaba todo lo ocurrido desde lejos muy emocionada al ver la bondad de Agustina y sus amigos.

"Eres una niña muy valiente y especial", dijo Doña Rosa con lágrimas en los ojos. Agustina sonrió y se sintió feliz por haber ayudado a alguien más.

Se dio cuenta de que sus superpoderes no solo servían para limpiar el parque, sino también para hacer felices a las personas que lo visitaban. Desde ese día, Agustina siempre utilizaba sus poderes para ayudar a quienes lo necesitaban.

Y así, junto con Toby y Mitzy, vivieron muchas aventuras mágicas en las cuales demostraron que la bondad y la amistad pueden ser superpoderes también.