Los Superpoderes de la Atención



Era un hermoso día de primavera y Max y Nina decidieron explorar el bosque cercano a su casa. Mientras caminaban entre los árboles, escucharon un suave canto que los llevó hasta un claro iluminado por el sol. Allí, sobre una rama baja, se encontraba Foco, un búho de grandes ojos que brillaban como estrellas.

"Hola, pequeños aventureros. Soy Foco, el búho sabio. He estado observando cómo están explorando, y me gustaría enseñarles sobre el superpoder más importante de todos: la atención", dijo el búho con voz profunda y amistosa.

Max miró a Nina con curiosidad.

"¿Atención? ¿Eso se come?", preguntó divertido.

Foco rió suavemente.

"No, querido Max. La atención es un poder que todos tenemos. Nos ayuda a concentrarnos en lo que hacemos, a disfrutar del momento presente y a aprender cosas nuevas. ¿Quieren saber más?"

Nina asintió emocionada.

"Sí, por favor!"

"Primero, haremos un ejercicio muy divertido. Todos los días, en mi bosque, hay pequeños sonidos que la gente no escucha porque están distraídos. Vamos a jugar a identificar esos sonidos. Cierra los ojos y concéntrate”, explicó Foco.

Los dos amigos cerraron los ojos. Max se concentró y pudo escuchar el trino de un pájaro, el crujir de las hojas y el suave murmullo de un arroyo. Cuando abrieron los ojos, estaban llenos de alegría.

"¡Eso fue increíble, Foco!" exclamó Nina.

"Sí, me sentí como un verdadero explorador", agregó Max.

Foco sonrió y movió su cabeza, feliz de verlos tan entusiasmados.

"Eso es solo el comienzo. Ahora pasemos a otra actividad: el arte de la concentración. En esta prueba, tendrán que observar un objeto mientras yo les cuento una historia. Al final, haré preguntas sobre lo que observaron. ¿Listos?"

Ambos amigos asintieron con energía. Foco les mostró una hermosa hoja dorada.

"Era una vez un árbol en lo alto de la montaña que comenzó a cambiar sus hojas de verde a dorado. Todos los animales del bosque admiraban su belleza. Uno de ellos, un pequeño ratón llamado Rufi, decidió hacer su nido en las ramas de este árbol, porque sabía que estaba a salvo allí, alcanzando el cielo. Pregunta: ¿De qué color eran las hojas del árbol?"

"¡Dorado!" gritaron al unísono.

"¿Y cómo se llamaba el ratón?" indagó Foco.

"¡Rufi!" respondió Nina, sintiéndose emocionada por acertar.

Foco sonrió nuevamente y les dijo:

"¡Excelente! Ven, pasemos a la última actividad. Es una combinación de todo lo que hemos aprendido. Se llama ‘El Reto de la Atención’. Tendrán que encontrar cinco objetos diferentes en el bosque mientras se concentran en no distraerse de la tarea".

Max y Nina aceptaron el desafío, y corrieron enfocados en su objetivo. Mientras buscaban, Nina se distrajo y comenzó a mirar las nubes.

"¡Mirá, Max! Esa nube parece un dinosaurio", exclamó.

Max se detuvo y le respondió:

"Está buenísima, pero no nos olvidemos del reto. Concentrémonos en lo que estamos buscando!"

Foco observaba con atención, disfrutando del intercambio entre los amigos.

"Recuerden, a veces las distracciones parecen divertidas, pero el verdadero disfrute está en lo que están haciendo ahora. Letras y criaturas pueden esperar. Concentración, pequeños!"

Finalmente, tras unas risas y anécdotas, Max y Nina lograron encontrar los cinco objetos.

Vieron una piedra brillante, una flor de colores, una pluma, una pequeña piña y una hoja gigante. Cuando Foco los felicitó, se sintieron orgullosos.

"Gracias, Foco. Ahora entiendo que la atención es un verdadero superpoder", dijo Nina con una gran sonrisa.

"Sí, tal vez podamos usar este superpoder en el colegio y en casa también", agregó Max.

Foco les guiñó un ojo.

"Exactamente, pequeños. Al enfocarse, aprenden a disfrutar más todo lo que hacen. Recuerden que no solo se trata de los resultados, sino también de cada momento!"

Max y Nina se despidieron de Foco con el corazón lleno de gratitud. Al volver a casa, hablaron de lo que habían aprendido y se hicieron la promesa de practicar su atención cada día.

"Hoy fue un día definitivamente especial, Max. Vamos a ser los mejores en la concentración!" dijo Nina entusiasmada.

"Sí! ¡Atención, aquí vamos!" rió Max, y juntos se encaminaron hacia su próxima aventura con una nueva perspectiva y, por supuesto, un superpoder recién descubierto.

FIN.

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