Los valientes amigos del bosque
Había una vez en un hermoso bosque, tres perros muy curiosos: Roco, Luna y Toby. Un día soleado, mientras exploraban el bosque, vieron a lo lejos una ardilla saltando de rama en rama.
Los tres perros se emocionaron y decidieron seguir a la ardilla. - ¡Vamos! ¡No dejemos que se escape! - ladro Roco emocionado. Los tres perros corrieron detrás de la ardilla hasta llegar a un árbol enorme con muchas ramas.
La ardilla subió rápidamente por el tronco del árbol y desapareció entre las hojas. - ¿Cómo vamos a alcanzarla? - preguntó Luna preocupada. En ese momento, vieron unas escaleras cercanas que llevaban hasta las ramas más altas del árbol.
- ¡Ahí está nuestra oportunidad! Vamos a subir esas escaleras para atrapar a la ardilla - dijo Toby con entusiasmo. Los tres perros comenzaron a subir las escaleras con cuidado, uno tras otro.
Mientras tanto, unas hormigas trabajadoras pasaban cargando hojas y migajas de comida hacia su hormiguero cerca del árbol. Al ver a los perros acercarse, las hormigas se detuvieron y observaron con curiosidad. - ¡Miren esas hormiguitas tan pequeñas! - exclamó Roco sorprendido.
Las hormigas miraron hacia arriba y vieron a los tres perros acercándose cada vez más. Una de las hormigas valientes decidió hablar:- ¡Alto ahí! ¿A dónde creen que van? Los tres perros se detuvieron sorprendidos al escuchar la voz de la pequeña hormiga.
- Buscamos atrapar a la ardilla que subió por este árbol. ¿La han visto pasar por aquí? - preguntó Luna amablemente. La valiente hormiga les explicó que la ardilla había salido volando hacia otro árbol cercano cuando los perros comenzaron a subir las escaleras.
Los tres amigos caninos suspiraron decepcionados pero luego sonrieron al darse cuenta de lo divertida que había sido su aventura juntos. - Gracias por avisarnos, amiga hormiga.
Aunque no pudimos atrapar a la ardilla, nos divertimos mucho explorando juntos - dijo Toby contento. Las hormigas asintieron felices de haber ayudado y los tres perros decidieron bajar de nuevo por las escaleras para regresar al suelo del bosque.
Desde entonces, Roco, Luna y Toby siguieron siendo grandes amigos y recordaban aquella aventura como una experiencia inolvidable llena de aprendizajes sobre trabajo en equipo y solidaridad con otros seres del bosque. Y así continuaron explorando juntos cada rincón del maravilloso lugar donde vivían.
FIN.