Luca aprende a dormir sin su celular

Había una vez un niño llamado Luca, a quien le encantaba pasar horas en su celular jugando, viendo videos y chateando con sus amigos.

Tanto era su amor por el celular que incluso lo llevaba a la cama todas las noches. Un día, los padres de Luca se dieron cuenta de que esto estaba afectando su sueño y decidieron tomar medidas.

Le dijeron a Luca que ya no podía llevar el celular a la cama y tenía que aprender a dormir por la noche sin él. Luca se sintió triste al principio, pero decidió aceptar el desafío. La primera noche fue difícil para él. Se dio vueltas en la cama durante horas sin poder dormir.

Finalmente, se quedó dormido solo cuando empezaba a amanecer. Al día siguiente, Luca se sintió cansado todo el día y no pudo concentrarse en sus actividades escolares como solía hacerlo. Pero decidió seguir intentándolo.

La segunda noche fue igualmente difícil para él. Pero esta vez tuvo una idea: decidió leer un libro antes de acostarse en lugar de usar su celular.

Leyó una historia emocionante sobre un pirata valiente que luchaba contra monstruos marinos y aventuras increíbles en alta mar. Pronto se dio cuenta de que había pasado más tiempo del esperado leyendo y ya era muy tarde para conciliar el sueño esa noche también.

Sin embargo, al tercer día algo sorprendente ocurrió: Luca comenzó a sentirse más relajado antes de dormir gracias al libro que leyó antes de acostarse cada noche. Además, descubrió nuevos pasatiempos como pintar o armar rompecabezas para mantenerse ocupado durante el día.

Un día, mientras estaba en la cama leyendo su libro antes de dormir, Luca se dio cuenta de que ya era muy tarde y comenzó a cerrar lentamente sus ojos. De repente, una idea brillante cruzó por su mente: "¡Lo logré! Finalmente aprendí a dormir sin mi celular".

A partir de ese día, Luca siguió disfrutando de leer libros cada noche antes de dormir y encontró nuevas formas creativas y divertidas para pasar el tiempo durante el día. Ya no necesitaba su celular para sentirse feliz.

Y así termina nuestra historia, con un final feliz donde Luca aprendió una valiosa lección sobre la importancia del sueño saludable y cómo los pasatiempos pueden ser mucho más gratificantes que estar pegado al celular todo el tiempo.