Lucía, la heroína de los primeros auxilios
Había una vez, en un pequeño pueblo rodeado de montañas y ríos, una niña llamada Lucía. Era muy tímida y le costaba mucho hacer amigos.
Siempre se sentía sola y triste cuando veía a los demás niños jugar juntos. Un día, mientras caminaba por el parque del pueblo, vio a un grupo de niños jugando al fútbol. Lucía deseó poder unirse a ellos pero su timidez le impedía acercarse.
De repente, sintió una emoción extraña en su corazón que la impulsó a dar el primer paso. - Hola chicos -dijo tímidamente. Los niños se detuvieron y la miraron con curiosidad. - ¿Quieres jugar con nosotros? -preguntó uno de los niños con una sonrisa amable.
Lucía asintió emocionada y corrió hacia el campo para unirse al juego. A medida que iba pasando el tiempo, empezó a sentirse más cómoda y divertida gracias al compañerismo que había encontrado entre sus nuevos amigos.
Pero entonces ocurrió algo inesperado: uno de los niños cayó herido durante el juego. Los demás se preocuparon por él pero no sabían qué hacer para ayudarlo.
Fue entonces cuando Lucía recordó lo que había aprendido en las clases de primeros auxilios en la escuela:- Chicos, yo sé cómo ayudarlo -dijo confiada. Con sus conocimientos sobre primeros auxilios, logró estabilizar al niño herido hasta que llegara la ambulancia. Todos quedaron impresionados por su valentía y habilidades médicas improvisadas.
Desde ese día, Lucía se convirtió en la heroína del pueblo. Los niños la admiraban y querían jugar con ella todo el tiempo.
Lucía aprendió que su timidez no tenía por qué limitarla y que podía hacer grandes cosas si confiaba en sí misma.
Y así, gracias a la emoción de ayudar a los demás, la diversión de jugar con sus amigos y el compañerismo que encontró en ellos, Lucía logró superar su timidez y encontrar un lugar especial en el corazón de todos los habitantes del pueblo.
FIN.