Luís y el Gran Maratón del Bosque

Luís era un niño que nunca dejaba de correr. Desde que salía de la escuela hasta que se iba a dormir, siempre estaba corriendo de un lado a otro.

Le encantaba sentir el viento en su rostro, escuchar sus propios pasos y descubrir los colores del día, el campo y las aves. Un día, mientras corría por el bosque cerca de su casa, se encontró con un grupo de animales que estaban muy preocupados.

- ¿Qué les pasa a ustedes? - preguntó Luís, un poco sorprendido. - Estamos muy tristes porque este año no podremos hacer el Gran Maratón del Bosque. - contestó el conejo Floppy.

Luís nunca había oído hablar de esa carrera, así que le pidió a Floppy que le contara más sobre ella. Resulta que cada año, los animales del bosque organizaban una gran carrera a través del campo, el bosque y el arroyo. Pero este año, el río se desbordó y el camino estaba bloqueado.

Luís sintió una gran tristeza al escuchar eso, así que decidió ayudar a sus amigos. - No se preocupen, yo encontraré una solución para que puedan correr el Gran Maratón del Bosque.

Luís pasó varios días pensando en cómo resolver el problema. Un día, se le ocurrió que podían construir un puente con troncos y ramas para cruzar el río. Reunió a todos los animales del bosque y juntos trabajaron arduamente para construir el puente.

Finalmente, el día del Gran Maratón del Bosque llegó. Todos los animales estaban emocionados y agradecidos con Luís por su ayuda. La carrera comenzó y Luís también decidió participar. Corrieron a través del campo, el bosque y el arroyo, todos disfrutando de la libertad de correr.

Al final, Luís y el conejo Floppy cruzaron juntos la línea de meta, seguidos de cerca por todos los demás animales. Fue un momento maravilloso que nunca olvidarían.

A partir de ese día, Luís supo que siempre podría contar con el bosque y sus amigos animales, y ellos siempre podrían contar con él. Desde entonces, cada año se celebra el Gran Maratón del Bosque, recordando la valentía y la solidaridad de Luís.