Luz, la científica astronauta-cantante
Había una vez una niña llamada Luz, que a sus cinco años era muy traviesa y curiosa. Vivía en una casa llena de libros y su mamá siempre estaba estudiando para convertirse en una gran abogada.
Luz admiraba mucho a su mamá, pero también le encantaba jugar e imaginar muchas cosas. Soñaba con ser doctora, astronauta, detective, chef, maestra, científica e incluso cantante.
Todos los días se disfrazaba y se metía en diferentes roles para vivir aventuras increíbles. Un día, mientras jugaba a ser doctora con su osito de peluche como paciente, Luz vio un libro sobre el espacio que había dejado su mamá sobre la mesa.
Se sintió tan emocionada que decidió convertirse en astronauta por un día. Buscó en su habitación todos los objetos brillantes que pudo encontrar: papel aluminio para hacer un traje espacial improvisado y una linterna para simular la luz de las estrellas.
Luz se puso su traje espacial hecho con papel aluminio y agarró la linterna como si fuera una nave espacial. Corrió por toda la casa simulando estar flotando en el espacio exterior mientras hacía ruidos de propulsores con la boca.
Mientras tanto, su mamá estaba inmersa en sus estudios cuando escuchó todo el alboroto que venía de la habitación de Luz. Decidió ir a ver qué estaba pasando y encontró a Luz vestida como astronauta. - ¡Hola mami! - exclamó Luz emocionada-.
Hoy soy una astronauta exploradora del universo. La mamá sonrió y le preguntó: "¿Y qué descubriste en tu misión espacial?"Luz pensó por un momento y respondió: "Descubrí que el espacio es tan grande y misterioso, pero también muy emocionante.
Me encantaría aprender más sobre los planetas y las estrellas". La mamá se emocionó al escuchar a Luz hablar con tanta pasión.
Decidió llevarla a la biblioteca para buscar libros sobre el espacio y juntas investigaron sobre los planetas, las constelaciones y los astronautas reales. A medida que Luz crecía, su curiosidad y amor por aprender seguían creciendo.
Cada día jugaba a ser una cosa diferente: detective para resolver misterios en el vecindario, chef para cocinar deliciosos platillos con su mamá, maestra para enseñarle a sus muñecos nuevos conocimientos y científica para realizar experimentos fascinantes.
La pasión de Luz por la música también se hizo evidente cuando cantaba canciones mientras ayudaba a su mamá en la cocina o mientras exploraba el mundo como una aventurera. Con el tiempo, Luz se dio cuenta de que podía combinar todas sus pasiones en una sola carrera: convertirse en una científica astronauta que también cantara.
Estudió mucho, se preparó académicamente y nunca dejó de perseguir sus sueños. Cuando finalmente cumplió su sueño de convertirse en científica astronauta-cantante, Luz recordaba con cariño aquellos días de juegos e imaginación en los que descubrió lo que realmente le apasionaba.
Y siempre agradecía a su mamá por haberle permitido explorar tantos caminos diferentes sin limitarla. La historia de Luz nos enseña que es importante permitir a los niños explorar sus intereses y sueños, incluso si parecen diferentes o poco convencionales.
Cada experiencia de juego e imaginación puede ser un paso hacia su futuro, ayudándolos a descubrir lo que realmente les apasiona y los hace felices.
FIN.