Manchas de Amistad



En un tranquilo y colorido campo de la Argentina vivía una vaca llamada Violeta. A Violeta le encantaba jugar y divertirse, pero se sentía muy sola porque los demás animales no querían ser sus amigos.

Siempre que intentaba unirse a sus juegos, los otros animales se burlaban de ella por tener manchas de colores en su piel y le decían —"cebra" .

Un día, mientras Violeta jugaba tristemente en un rincón del campo, apareció Luca, el perro más amistoso y valiente de toda la región. Luca notó la tristeza de Violeta y se acercó a ella con una sonrisa. "Hola, soy Luca. ¿Por qué estás tan triste, Violeta?" -preguntó el perro con cariño.

Violeta levantó la mirada sorprendida de que alguien finalmente se preocupara por ella y respondió con voz temblorosa: "Todos los demás animales me llaman —"cebra"  por mis manchas de colores. No quieren ser mis amigos".

Luca escuchó atentamente a Violeta y luego sacó algo de su mochila: ¡una foto de una verdadera cebra! Mostrándole la imagen a Violeta, le dijo: "¡Mira esta cebra! Tiene rayas negras y blancas, ¡no es como tú! Tú eres única y especial con tus manchas multicolores".

Los ojos de Violeta se iluminaron al ver la foto y comprendió lo que Luca quería decirle. De repente, sintió una oleada de alegría recorrer su cuerpo al darse cuenta de lo especial que era.

"¡Gracias, Luca! ¡Eres el mejor amigo que podría desear!" -exclamó emocionada. Desde ese día en adelante, Luca pasaba horas jugando con Violeta en el campo. Los demás animales vieron lo felices que eran juntos e incluso algunos se unieron a sus juegos.

Ya nadie se burlaba ni llamaba —"cebra"  a Violeta; ahora todos veían su belleza única y apreciaban su singularidad.

Violeta aprendió que no importaba si era diferente a los demás; lo importante era ser fiel a sí misma y rodearse de amigos verdaderos que la aceptaran tal como era. Y así fue como esa vaca solitaria encontró la verdadera amistad gracias al amor incondicional del perro Luca.

Y colorín colorado, este cuento ha terminado pero la amistad entre ellos continuará floreciendo para siempre en aquel hermoso campo argentino.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!