Margarita y el Jardín de Sonrisas



Había una vez en una ciudad llena de nubes grises, una chica llamada Margarita, que tenía un talento especial para alegrar a todos. Un día, Margarita decidió crear un jardín de flores con caras sonrientes para iluminar la ciudad.

"¡Voy a plantar sonrisas para todos!", exclamó emocionada. La gente al principio dudaba, pero unos días después, comenzaron a florecer flores de colores vibrantes y risueños. Sin embargo, un fuerte viento arrasó con el jardín.

Pero en lugar de rendirse, Margarita se levantó: "No voy a dejar que mis sonrisas se apaguen", gritó. Y junto a sus amigos, decidieron plantar más flores, creando un jardín aún más hermoso.

El pueblo se llenó de alegría y aprendieron que las sonrisas son más fuertes cuando se comparten.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!