María y la Noche de Halloween
Había una vez una niña llamada María que, a pesar de las advertencias de su mamá sobre la noche de Halloween, decidió salir sin su permiso.
Mientras caminaba por las oscuras calles, María se encontró con sus amigas disfrazadas y emocionadas por la fiesta de disfraces que habían planeado. Juntas, se dirigieron a una misteriosa casa encantada que había escuchado rumores. A medida que se adentraban en la casa, las risas se convirtieron en susurros de miedo.
De repente, las luces parpadearon y María se separó de sus amigas. Ella se encontró en una habitación oscura y fría donde una voz misteriosa la desafió a superar sus miedos.
Con valentía, María enfrentó sus temores y descubrió que todo era una ilusión creada por su propia mente. Al reunirse con sus amigas, María les contó lo que había aprendido: que el coraje y la amistad siempre superan los miedos e ilusiones.
Desde ese día, María valoró las advertencias de su mamá y comprendió la importancia de la prudencia y la aceptación de las consecuencias de sus acciones.
FIN.