Melina la infiel y rompe corazones
Había una vez en el bosque encantado de Villa Alegre, una joven hada llamada Melina. Ella era famosa por su belleza y encanto, pero también por ser conocida como la infiel y rompe corazones.
Melina siempre buscaba la atención de los demás hadas y hados, y no le importaba herir los sentimientos de los demás con tal de sentirse admirada. Un día, la Reina de las Hadas convocó a Melina a su corte.-Melina,
has lastimado los corazones de muchos en nuestro bosque con tu actitud egoísta y cruel. Debes aprender a valorar y respetar los sentimientos de los demás, o de lo contrario te verás obligada a abandonar el bosque para siempre -advirtió la Reina con firmeza.-No
me importa, yo puedo conseguir amor y admiración en cualquier otro lugar -respondió Melina con arrogancia. Pero la Reina no estaba dispuesta a darse por vencida, y decidió darle una lección a Melina.
La Reina lanzó un hechizo sobre Melina, y la transformó en una mariposa sin poderes mágicos, con el objetivo de que aprendiera a valorar lo que había despreciado. Melina, confundida y asustada, voló hasta el borde del bosque, donde conoció a una abejita llamada Luna.-¿Qué
te pasó, pequeña mariposa? -preguntó Luna con curiosidad.-Soy Melina, el hada infiel y rompe corazones, y la Reina me ha transformado en esta mariposa como castigo -respondió Melina con tristeza.
Luna, compadeciéndose de ella, decidió ayudar a Melina a encontrar su camino de regreso al bosque. Durante su travesía, Melina aprendió a valorar la amistad y a cuidar de los demás, y descubrió el verdadero significado del amor y la empatía.
Finalmente, Melina regresó al bosque, no como el hada arrogante y egocéntrica que solía ser, sino como una hada humilde y compasiva. La Reina, al ver el cambio en Melina, levantó el hechizo y le devolvió sus poderes mágicos.
Melina se convirtió en una hada ejemplar, dedicada a ayudar a los demás y a ser una amiga leal. Desde ese día, Melina se ganó el cariño y la admiración de todos en el bosque encantado de Villa Alegre.
FIN.