Mi Estrella de Mar

Había una vez en la costa de Mar del Plata, Argentina, un niño llamado Lucas que pasaba sus días jugando en la playa.

Un día, mientras caminaba por la orilla, encontró una estrella de mar brillante y la llevó a casa. Lucas decidió llamarla Estrellita, y juntos se convirtieron en grandes amigos. Todos los días, Lucas y Estrellita jugaban en la playa, construían castillos de arena y exploraban las mareas bajas en busca de tesoros marinos.

"Estrellita, eres como mi mejor amiga", le decía Lucas mientras acariciaba su suave textura. Un día, una tormenta azotó la costa y Estrellita desapareció. Lucas la buscó por todas partes, pero no lograba encontrarla.

Después de varios días de tristeza, Lucas se encontró con un pescador que le contó que las estrellas de mar a menudo son arrastradas por las tormentas y que, si tienen suerte, son devueltas al mar.

Con esperanza en el corazón, Lucas regresó a la playa y, para su sorpresa, vio a Estrellita en la orilla. Sin dudarlo, la tomó en sus manos y la devolvió al mar. Estrellita se aferró a su mano por un momento antes de deslizarse suavemente de vuelta al agua.

Lucas se sentía triste por haber perdido a su amiga, pero sabía que ella pertenecía al mar. A partir de ese día, Lucas visitaba la playa con la esperanza de ver a Estrellita nuevamente.

Aprendió que aunque las amistades a veces se alejan, los recuerdos y los momentos felices permanecen para siempre en el corazón.